Sin dudas las bajas temperaturas con las que mayo se despidió para darle lugar a junio anticipan la llegada del invierno, y con él, un aumento ostensible del consumo de gas. Como el sistema de transporte y distribución prioriza a domicilios, el desbalance obligado lo costean muchas empresas e incluso el transporte vehícular a GNC: por eso, ya comenzaron a aplicarse restricciones en la modalidad de los llamados contratos "interrumpibles" de hasta el 70%.
El registro del martes 31 del Enargas (Ente Nacional Regulador del Gas) sobre despachos para transporte y distribución confirma que con los primeros fríos "en serio", la demanda prioritaria creció un 70% interanual. Equivale a decir que los hogares captaron 84,1 millones de m3 diarios contra 49 millones insumidos en mayo del 2021.
Aunque un poco menos, también creció la demanda industrial y de GNC en comparación con el promedio a la misma fecha del año pasado. En el primer caso, el segmento mayormente identificado con Grandes Usuarios, trepó de 32,8 millones de m3 a 34,3 millones, mientras que el combustible vehicular sumó más de 1 punto interanual al pasar de 5,6 a 6,7 a la fecha.
En total, sólo entre el lunes 30 y el martes 31 el sistema demandó 3 millones más, para totalizar un "line-pack" (término que pondera lo que se inyecta al sistema de transporte) de 347,9 millones.
Qué pasa en Mendoza
En ese contexto ¿cómo se comportó el consumo de los hogares mendocinos con la ola polar? Sólo en dos días creció 20%: los clientes de Distribuidora de Gas Cuyana demandaron 4,9 millones de m3 durante un domingo 29 frío (8,2 °C), nivel que al martes 31 había escalado a 5,9 millones. Sin embargo, el salto interanual para la misma fecha es más notable: en el penúltimo día de mayo del 2021 (con 10,7°C) las viviendas habían consumido 3,75 M de m3, casi 33% menos.
La evolución acompaña la tendencia a nivel nacional, con cifras propias. En lo que va de la semana, la demanda prioritaria que atiende Cuyana en Mendoza representa alrededor de un 7% del volúmen distribuído en todo el país a los hogares por las 9 empresas licenciatarias.
"Aunque tampoco se modifica de manera lineal, la demanda más permeable o sensible a las bajas temperaturas es la residencial. Por eso el suministro es prioridad. No pasa lo mismo con las industrias", remarcaron desde el Enargas acerca del criterio para administrar un recurso que sin una producción plena está en tensión y depende en buena medida de la importación.
De hecho, durante los dos últimos días de mayo llegaron 3 embarques a los puertos de Escobar y Bahía Blanca equivalentes a un 15% de todo lo despachado para el consumo. Se espera otro para dentro de una semana, con un volúmen de 14 millones.
Del mantenimiento preventivo al corte forzado
Cuando empieza un mes clave como junio, con subas de tarifas de hasta el 25% por costos de abastecimiento (todavía sin impacto de la segmentación de subsidios), Ecogas empezó a recurrir a los cortes para mantener equilibrada la balanza y evitar faltantes para las viviendas mendocinas.
Concretamente, son cortes programados dentro de los llamados "contratos interrumpibles". Según admitió Juan Manuel García, vocero de la compañía "dadas las bajas temperaturas de esta semana empezamos con restricciones del 70% del suministro para algo menos de 20 clientes. El primer filtro para determinar la proporción es el tipo de contrato, ya que son industrias que nominaron un volúmen de consumo cada una".
Es la segunda oportunidad en casi mes y medio para empresas de demanda intensiva, obligadas a recurrir a otra fuente energética gracias a una matriz mixta (las que cuentan con ella). A mediados de abril, varias habían experimentado interrupciones tras ser notificados por los productores-comercializadores de gas sobre un "mantenimiento planificado" (ver).
En cuanto al otro eslabón, desde las estaciones de expendio de GNC (Gas Natural Comprimido) se mantienen a la expectativa. Saben que puede tocarles el próximo turno.
"Todavía no hemos sido notificados de cortes ni de cupos. Pero es esperable que eso ocurra tarde o temprano", reconoció Isabelino Rodríguez, presidente de Amena (Asociación Mendocina de Expendedores de Nafta y Afines), desde un sector que al mismo tiempo tiene que lidiar con otro frente conflictivo, como el agravamiento de los faltantes de gasoil.
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