El presidente Alberto Fernández tenía previsto viajar el próximo martes 31 de agosto al mediodía rumbo a Ecuador donde tenía pautado una entrevista con el presidente de ese país, Guillermo Lasso. La visita de Estado estaba pautada para que dure dos días pero la obligación de tener que tener un período de aislamiento a regreso por haber viajado al exterior, como cuando estuvo a fines de julio en Perú, hizo que el primer mandatario de la Argentina definiera desestimar este viaje.
La intención de Fernández es estar abocado específicamente a los temas domésticos a dedicarse a los últimos días de la campaña, en la previa a las primarias abiertas y obligatorias (PASO), algo que iba a generar algún tipo de complejidad porque si visitaba Ecuador a su regreso iba a tener que estar 10 días en la Quinta de Olivos realizando el período de aislamiento.
En este contexto, además, el Presidente felicitó al gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, que logró ayer su reelección por una amplia diferencia con relación al candidato del Frente de Todos. Fue una paliza electoral y cosechó el 76% de los votos. "Mis felicitaciones, seguiremos trabajando unidos en la diversidad por el bien del querido pueblo correntino", señaló a través de las redes sociales.
Según estaba establecido en la agenda, que ahora deberá encontrar una nueva fecha, el martes por la noche, Fernández y Lasso iban a tener una cena. El mandatario argentino no viajó para la asunción del presidente ecuatoriano que ocurrió el 24 de mayo, fecha elegida por la conmemoración de la Batalla del Pichincha de 1822, clave para la independencia de ese país. En ese momento la segunda ola de la pandemia de la COVID-19 castigaba muy fuerte a la Argentina y debido a ello suspendió el viaje