El municipio de Las Heras es el único del interior del país en contar con un Centro de Educación Temprana (CET), iniciativa del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que concretó un convenio colaborativo de políticas socioeducativas con el departamento mendocino.
Se trata de un espacio pedagógico que funciona en el jardín de infantes Gorrioncitos de El Plumerillo, destinado a bebés de 45 días hasta niños de tres años. Se trabaja de forma interdisciplinaria y en conjunto con las familias, cuyos encuentros se dan una vez por semana, los sábados.
"Me parece una idea muy buena la que comenzaron en el jardín, nos integra mejor en familia para poder, como dicen, aprender jugando; yo como padre siento que este momento que comparto con mi hija me facilita y me enseña herramientas para criarla y conocerla mejor", expresó Diego Jofré, papá de Samira del jardín Gorrioncitos. Y sus sensaciones son similares a las que experimentan el resto de las familias que se sumaron a la propuesta definida como "una experiencia de encuentro entre los padres y sus hijos".
Los CET son una propuesta educativa integral destinada a las familias que tengan hijas e hijos desde 45 días hasta 3 años de edad. El objetivo es aportar herramientas educativas y fortalecer los vínculos tempranos, acompañando a las madres y padres y reconociendo así a las familias como primer grupo de pertenencia, de vinculación, socialización y cuidado infantil.
El primer Centro de Educación Temprana del interior del país surge luego de un convenio colaborativo de políticas socioeducativas entre la Ciudad de Buenos Aires y la Municipalidad de Las Heras. La idea es replicarlo en otros jardines maternales del departamento. El CET del jardín de infantes Gorrioncitos, ubicado en calle 3 de Febrero y Maipú de El Plumerillo, está abierto también a su comunidad. En esta etapa inicial, por protocolos de pandemia se han creado burbujas de 10 familias que asisten todos los sábados a este Centro de Educación Temprana.
Los padres con residencia en El Plumerillo e interesados en formar parte de este espacio educativo pueden acercarse al jardín, de lunes a viernes de 8 a 15. Para entender esta experiencia de vida en familia dentro de este espacio, uno debe vivenciarlo puesto que cada salita se convierte en un momento pedagógico especial e íntimo entre los padres y sus hijos.
Un día en el CET de Las Heras comienza con una bienvenida compartida con todas las familias, donde se revelan anécdotas, canciones, novedades propias de la comunidad de El Plumerillo. Allí, los educadores anticipan la propuesta diseñada, que abarcará juegos y experiencias de aprendizaje para cada grupo dividido por edades (la segmentación es de 45 días a 1 año, de 1 a 2 y de 2 a 3 años).
Cada actividad está pensada con una intencionalidad educativa, tanto para las familias como para los niños, donde se los invita a transitar diferentes desafíos, situaciones lúdicas del aprendizaje donde poner el cuerpo en acción y resolver consignas juntos. Luego, las familias del CET comparten un desayuno que se convierte en una instancia de intercambio y comunicación entre las familias y educadores, fortaleciendo los vínculos y la confianza.
La jornada se enriquece con un taller de Crianzas y Educación destinado a los adultos, que promueve los intercambios, la escucha grupal, la reflexión, la participación y brindan la posibilidad de acceder a diferentes herramientas teóricas y prácticas que acompañen el rol de las familias como primeros educadores de sus hijos.
El equipo de profesionales municipales y contratados para el CET cuenta con seis capacitadores y una coordinadora. Ellos son: un psicólogo perinatal, una terapeuta del lenguaje, fonoaudióloga, un especialista en psicomotricidad y dos docentes del nivel inicial especializados en atención temprana.
Graciela Gelabert, subdirectora de Educación de Las Heras, puso de relieve el hecho de que con este innovador espacio educativo. "Nos ubica como pioneros en implementar políticas de primera infancia y atención temprana en el interior del país y nos motiva en un futuro a poder replicarlo en todos los jardines maternales del departamento", manifestó.
Vanina Isaguirre, una de las capacitadoras del CET, destacó: "Los primeros años de vida, y en particular desde el embarazo hasta los 3 años, los niños necesitan nutrición, protección y estimulación para que su cerebro se desarrolle correctamente. Las intervenciones en los primeros años de vida son fundamentales para el desarrollo futuro de los niños y niñas, de allí lo valioso de este Centro de Educación Temprana".
Por su parte, Victoria Abihaggle, de la Agencia para el Desarrollo de la Primera Infancia de Las Heras, aportó que "es un programa que viene funcionando en la Ciudad de Buenos Aires y hoy funciona en El Plumerillo". Y concluyó: "Nos pone orgullosos que comience a desarrollarse con las familias de Las Heras y poder hacerlo junto al municipio. La verdad que es un hito que pueda anclarse en el interior del país y en Las Heras porque estamos hablando de criar el futuro de toda sociedad, que son nuestros niños".