Quedaron formalmente puestos en funcionamiento los nuevos equipos de hemodinamia que el Ministerio de Salud adquirió para el hospital Central y que permitirán realizar estudios relacionados a esta área médica de forma rápida y con tecnología de avanzada.
Los aparatos, cuyo precio asciende a $1.800.000, son los primeros que se adquieren para este tipo de estudios luego de 20 años en que el nosocomio trabajó con una sola sala de servicios hemodinámicos y las listas de espera para realizar estudios coronarios fueron extensas.
Este es un equipo que permite hacer todo tipo de aplicaciones hendoprotesicas por vía hemodinámica, por lo que permite la colocación de estén y marcapasos. Con el avance de esta tecnología esto nos permitirá colocar prótesis coronarias con mayor facilidad y rapidez, comentó el director del Hospital Central, Gustavo Perone.
Con esta novedad, el centro de salud más importante de la provincia podrá volver a incluir la realización de procedimientos de marcapasos, colocación que estaba suspendida por problemas operativos y de infraestructura. Estas intervenciones, que en hospitales privados valen más de 20 mil pesos, podrán realizarse de forma gratuita.
La inauguración fue presidida por el ministro de Salud, Carlos Behler, quien resaltó la importancia de la adquisición e informó que ahora la sala de hemodinamia, de ser necesario, podrá transformarse en un quirófano si los estudios realizados demuestran la necesidad de realizar una intervención de forma urgente.
La inauguración se vio empañada por pedido de camas
En medio del acto inaugural y cuando el ministro se disponía a informar los beneficios de la tecnología comprada, un joven de 25 años interrumpió a los gritos al funcionario y pidió desesperadamente una cama para su madre, la cual necesita ser operada de la columna vertebral y hace semanas se encuentra en lista de espera.
La familia de la mujer, que pidió no difundir su nombre a los medios, habita en Rivadavia y desde hace cuatro días concurre a diario al nosocomio ante la promesa de conseguir un lugar para la internación, sin embargo al llegar al lugar se les informa de la imposibilidad de realizar la intervención.
Luego de momentos de tensión donde uniformados quisieron detener al joven, Behler tomó intervención, pidió que lo soltaran y realizó las gestiones para conseguir la tan pedida y necesaria cama de internación.