Recomiendan no tomar ciertos medicamentos para aliviar los síntomas del dengue.
La fiebre es un tema importante en cuanto a la salud humana, ya que puede ser un indicio de una infección o enfermedad en el organismo. La fiebre es un aumento de la temperatura corporal que se da de manera temporal como una respuesta automática del cuerpo humano al querer combatir ciertas bacterias o virus que se encuentran en el organismo.
La fiebre puede manifestarse como consecuencia de una infección, una exposición al sol desmedida o como un efecto secundario ante la aplicación de vacunas o tratamientos específicos. Por lo tanto, es importante consultar a un médico al notar alguno de los signos de la fiebre, como la sudoración, el cansancio o el aumento de la temperatura corporal. Es especialmente importante para aquellas personas inmunocomprometidas o que están en recuperación tras haber pasado por un procedimiento quirúrgico.
Para detectar la fiebre, se debe saber que en un adulto, la temperatura corporal normal puede variar entre los 36°C y los 37.5 °C. A partir de los 37.6°C se considera febrícula y de los 38°C, fiebre. En tanto, una temperatura mayor a 37.2°C es considerada como fiebre en niños. Estas mediciones corresponden a una toma de temperatura con termómetro, por medio axilar. Para que el resultado sea más preciso, el análisis se deberá realizar con la persona quieta, en posición de descanso.
Además de consultar con un médico para descartar patologías, se recomienda seguir ciertos hábitos para disminuir la fiebre y recuperarse progresivamente. Entre ellos, se encuentra el reposo y el descanso, ya que el ascenso de temperatura corporal puede generar cansancio y dolores corporales. También es importante mantenerse hidratado, ya que el cuerpo se deshidrata a través de la sudoración. Para ello, se debe tomar abundante agua y bebidas frescas que permitan recuperar y retener líquidos.
Tomar analgésicos de venta libre como el paracetamol y el ibuprofeno son las opciones más utilizadas para reducir la fiebre. Se deberá tener en cuenta cuáles son las dosis diarias correspondientes para cada edad y respetar los intervalos horarios requeridos, los cuales están indicados en el prospecto. Si los síntomas continúan, es importante acudir a un profesional de la salud con celeridad.
Otras recomendaciones para tratar la fiebre incluyen vestirse con ropa liviana y pocas capas, consumir una alimentación saludable y evitar comidas altas en grasas, utilizar comprensas frías para aliviar la sensación cálida y realizar baños tibios para deshacerse de la sudoración. Además, es importante mantener una temperatura ambiente estable, mantener los ambientes ventilados y no subir la calefacción en exceso, según publica La Nación.
En conclusión, es importante controlar la fiebre, ya que puede ser un indicio de una infección o enfermedad en el organismo. Si esto persiste durante varios días a pesar de tomar analgésicos o se presentan otros síntomas, será necesario acudir a un médico para obtener un diagnóstico y tratamiento certero.