Un estudio de las Naciones Unidas reveló que unos 7 millones de personas afectadas por la violencia en Siria requieren ayuda humanitaria urgente, para lo cual es necesario recolectar 4.400 millones de dólares este año. Valerie Amos, coordinadora de operaciones humanitarias de la ONU, declaró en Kuwait que dentro de esos 7 millones de personas, 2 millones permanecen refugiadas en otros países.
"Nosotros hacemos aquello que podemos, pero no es suficiente", manifestó Amos en una rueda de prensa este martes. Señaló la necesidad de contar con recursos este año por 4.400 millones de dólares para remediar la situación y advirtió que sólo fueron conseguidos 1.840 millones.
Asimismo, subrayó las dificultades que tiene el personal de Naciones Unidas para llevar ayuda a las zonas afectadas por los combates.
Por otro lado, Estados Unidos criticó fuertemente al ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguei Lavrov, por haber afirmado que el ataque con armas químicas en Siria el 21 de agosto fue "una provocación". "Lavrov está nadando a contracorriente de la opinión pública internacional, pero, más importante, a contracorriente de los hechos", dijo la vocera del Departamento de Estado, Jennifer Psaki.
El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, agregó este martes que pedirá a los líderes mundiales que actúen para detener el uso de armas químicas. "Haré un fuerte llamamiento a la acción en Siria durante la Asamblea General de la ONU la próxima semana", declaró.
Ban explicó que una futura resolución del Consejo de Seguridad de la ONU sobre Siria debe ser enérgica. Basándose en el informe que señala que cientos de personas murieron por armas químicas en agosto a las afueras de Damasco, Ban pidió que los responsables de esos ataques sean llevados ante la Justicia.