Estados Unidos sigue su avance en búsqueda del apoyo de la comunidad internacional para iniciar una intervención militar en Siria. A pesar de no haber conseguido el consenso que buscaba en la cumbre del G20, la Casa Blanca estableció una declaración conjunta que fue firmada por diez aliados.
De acuerdo con lo consignado por el Washington Post, los países que se alinearon al gobierno de Barack Obama en esta resolución son: Australia, Canadá, Francia, Italia, Japón, Corea del Sur, Arabia Saudita, España, Turquía y el Reino Unido.
A través de la declaración firmada en conjunto, estos países resaltan que el uso de armas químicas -en este caso por el régimen de Bashar Al Assad- atenta contra la seguridad de las personas. A su vez, agrega que la utilización de este tipo de armamentos incrementa los riesgos a una futura utilización y proliferación de estas armas.
En tanto, el comunicado "condena" fuertemente el ataque con armas químicas que llevó adelante el régimen sirio en los suburbios de Damasco, el 21 de agosto, y que dejó un alto saldo de víctimas civiles, entre ellos mujeres y niños.
En esa línea, la Casa Blanca, junto con sus "aliados", llaman a la comunidad internacional a sumarse a una fuerte respuesta contra la grave violación de las reglas del mundo y solicita que quienes han cometido estos crímenes rindan cuentas.
Por su parte, por medio de esta declaración se asegura que los firmantes han apoyado siempre una fuerte resolución del Consejo de Seguridad de la ONE, pero aclara que el mismo organismo sigue paralizado desde el inicio de la guerra en Siria, hace dos años y medios.
Los firmantes han apoyado siempre una fuerte resolución del Consejo de Seguridad de la ONU, dada sus responsabilidades para llevar la respuesta internacional, pero reconocemos que el Consejo sigue paralizado como lo ha sido durante dos años y medio (principalmente por la obstrucción de Rusia y China).
En ese sentido, el texto explica que el mundo no puede esperar interminables procesos erróneos, que sólo puede llevar a un mayor sufrimiento en Siria y la inestabilidad regional. A su vez, asegura que los firmantes también se han pronunciado a favor de la misión de investigación de la ONU para presentar los resultados sobre la utilización de armas químicas en Siria a la brevedad y de que el Consejo de Seguridad actúe en consecuencia.
Para concluir, por medio de esta declaración, los aliados, junto a Estados Unidos, se comprometen a buscar una solución política y pacífica a través de la plena aplicación del comunicado celebrado en Ginebra, en 2012, en caso de que el conflicto en Siria no tenga una solución militar.
¿En qué consiste el Plan de Ginebra?
El 30 de junio de 2012, los secretarios generales de la Organización de las Naciones Unidas y de la Liga de Estados Árabes, los ministros de Relaciones Exteriores de China, Francia, Rusia, Reino Unido, Estados Unidos, Turquía, Irak, Kuwait y de Qatar, y la alta representante de la Unión Europea, acordaron una serie de seis principios con el objetivo de poner fin a la violencia en Siria.
A continuación enumeramos esos principios:
- Perspectiva para el futuro. Las aspiraciones del pueblo sirio han sido claramente expresadas por el amplio espectro de sirios consultados. En su inmensa mayoría, desean un Estado que presente las siguientes características: que sea verdaderamente democrático y pluralista, que corresponda con las normas internacionales relativas a los derechos humanos y que ofrezca posibilidades y oportunidades iguales a todos.
- Medidas claras durante la transición. El conflicto en Siria no se terminará hasta que todas las partes tengan la garantía de que existe una vía pacífica hacia un futuro común para todos en Siria. Es, por lo tanto, esencial que todo arreglo incluya medidas claras e irreversibles durante la transición en función de un calendario preciso. Las principales medidas en todo proceso de transición son: el establecimiento de un órgano de gobierno transitorio capaz de instaurar un clima de neutralidad en el que pueda desarrollarse la transición; es al pueblo sirio a quien corresponde determinar el futuro del país; cuando se haya establecido el nuevo orden constitucional, habrá que preparar la organización de elecciones multipartidistas libres y equitativas.
- Seguridad, estabilidad y calma. Toda transición política implica un cambio. Es, sin embargo, esencial velar por el hecho de que la transición se desarrolle de manera tal que garantice la seguridad de todos en un ambiente de calma y estabilidad. Esto requiere: la instauración de un entorno perfectamente tranquilo y estable; medidas concretas para lograr que los grupos vulnerables sean protegidos.
-Medidas para lograr rápidamente un acuerdo político creíble. Es al pueblo sirio a quien corresponde llegar a un acuerdo político, pero el tiempo apremia. Es evidente que la soberanía, la independencia, la unidad y la integridad territorial de Siria deben ser respetadas; el conflicto debe ser resuelto únicamente a través de un diálogo pacífico y de la negociación; deben cesar los derramamientos de sangre; todas las partes deben colaborar realmente con el Enviado Especial Conjunto.