Naciones Unidas estima que siete millones de personas -cerca de un tercio de la población de Siria antes de la guerra- se vieron obligadas a abandonar sus hogares por el conflicto.
La agencia para los refugiados de la ONU dice que cinco millones de personas -en su mayoría mujeres y niños- se han desplazado dentro del país, mientras que dos millones han huido a países vecinos.
La agencia añadió que los países donantes han aportado menos de un tercio del dinero que se necesita para ayudar a los desplazados por el conflicto.
Tarik Kurdi, portavoz de la ONU, describió la asistencia de la organización como "una gota en el mar" en términos de la necesidad que hay en el país de ayuda humanitaria.