El único equipo en cancha en el primer tiempo fue la Rojita, fuera de unos pocos avances de su rival. Así, a los 17 llegó el gol de Nicolás Castillo, que se fue solo hacia el gol y la picó ante la salida de Auro Fernández.
A los 27, Diego Rubio recibió una falta dentro del área, y él mismo se encargo de ejecutar y concretar el penal que le daba la ventaja a los del vecino país. De esta forma, bajo el calor y el poco público (dos constantes del Sudamericano) se iban al vestuario 2 a 0 arriba.
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La parte final fue más equilibrada, con más llegadas del conjunto de amarillo y un once de chile que empezaba a refugiarse y tratar de manejar la pelota para hacer pasar los minutos. A los 22 Ely Esterilla, que había ingresado por Cevallos, descontó de cabeza y el encuentro se ponía más interesante.
Sin embargo, la supremacía de los chilenos en casi todo el torneo se iba a imponer, y a los 29 Claudio Baeza era el encargado de aumentar la cuenta mediante un gran tiro libre. Entretanto, la defensa ecuatoriana hacía agua por todos lados.
Por esto, la oportunidad de hacer crecer el marcador llegaría a los pies de Mora. Después de varios errores atrás, el delantero haría su tanto en la primera jugada que le tocó participar después de haber entrado por Rubio.
Formaciones:
Chile: Darío Melo, César Fuentes, Alejandro Contreras, Valber Huerta, Manuel Bravo, Ignacio Caroca, Sebastián Martínez, Diego Rubio, Bryan Rabello, Cristian Cuevas, Nicolás Castillo. DT: Mario Salas
Ecuador: Auro Fernández, Luis León, Marlon Mejía, Marcos López, Eddy Corozo, Cristian Ramírez, Carlos Gruezo, Jospe Cevallos, Miguel Parrales, Jacob Murillo, Junior Sornoza. DT: Julio Rosero
Árbitro: Víctor Carrillo