La renegociación de la deuda por US$ 44.000 millones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) es una prioridad para el Gobierno, por considerarla fundamental para la reactivación económica.
La renegociación de la deuda por US$ 44.000 millones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) es una prioridad para el Gobierno, por considerarla fundamental para la reactivación económica.
Para que la votación del organismo multilateral sobre un nuevo programa llegue a buen puerto, será clave el rol de los Estados Unidos, que sólo con su poder de veto puede impedir la aprobación.
La cuota actual de votación del FMI está compuesta por los Estados Unidos con 16,5%; Japón 6,1%; China 6%; Alemania 5,3%; Francia y Reino Unido 4%; entre otros. En tanto, hay un grupo de países que cuenta con el 23% del total en su poder.
Héctor Torres, ex director ejecutivo para Argentina del FMI, señaló a NA: "El Fondo no tiene que aprobar la renegociación. Si el Gobierno se lo pide, lo que el Fondo va a hacer es aprobar un nuevo programa con la Argentina".
"Los programas se aprueban con el 51% de los votos", subrayó, y evaluó: "Es muy difícil de imaginar que un acuerdo se apruebe sin el apoyo, o al menos la aquiescencia, del representante de Estados Unidos en el directorio".
El experto en la relación entre la Argentina y el FMI, analizó: "Estoy seguro de que el Fondo va a ser muy receptivo al pedido de refinanciación de la Argentina. Pero, por el momento no estoy seguro de que la Argentina le haya solicitado algo concreto".
Al ser consultado respecto del proceder del país sobre la deuda, manifestó: "Creo que estaríamos en mejor situación para negociar con los acreedores privados, si el Gobierno no hubiera renunciado a solicitarle al FMI la reactivación de los giros pendientes en el stand by firmado por el ex presidente Mauricio Macri".
"A la luz de la reacción positiva del Fondo frente a las medidas de ajuste fiscal tomadas por el Gobierno, creo que podríamos haber intentado reactivar el financiamiento del FMI que se interrumpió después de las PASO", sostuvo.
La Argentina necesita contar con la luz verde del país norteamericano y, de ser así, con sólo sumar a cuatro naciones europeas, lograría lo necesario de una mayoría simple para una resolución favorable. Así lo indicó a NA Sebastián Maril, analista financiero y especialista en política norteamericana.
"Si se necesita la mayoría simple, con tener apoyo de los Estados Unidos y cuatro países europeos, ya está el 50 por ciento", destacó Maril, quien apuntó: "Estados Unidos tiene poder de veto aunque el resto arregle un programa de reestructuración".
Por ello, alertó: "Más allá de que la matemática ayuda, Estados Unidos tiene el poder". Según el especialista, Estados Unidos está "mirando con una tensa calma la situación, opina muy poco, participa muy poco y amenaza con aranceles".
Si bien recordó que "Donald Trump está en un año electoral", puntualizó: "No veo un motivo por el cual Estados Unidos no ayude a la Argentina".
A mediados de febrero llegará la misión del Fondo y Maril estimó que, en esa oportunidad, el Gobierno "presentará un plan" y, luego de ello, "podría haber votación a principio de marzo".
"La reunión importante será en febrero, cuando se presente el plan oficialmente", pronosticó.
Remarcó que "hay que ver si se va a votar rápido y luego evaluar qué tan duros estarán los bonistas porque no van a aceptar cualquier cosa".
Fuente: NA