La Cámara Baja aprobó este miércoles por unanimidad el Programa Provincial de Búsqueda Familiar, de Identidad Biológica, de Origen y Socioafectivo. La problemática es tal que se calcula que en Mendoza más de 100 mil personas no conocen su identidad, mientras que en el país el número asciende a 3 millones.
María José Sanz. Foto: Prensa Legislatura.
"Queremos otorgarle herramientas a aquellas personas que tengan dudas sobre su identidad biológica o tienen la certeza de que le sustrajeron un hijo al nacer", expresó la diputada María José Sanz (UCR), autora de la propuesta.
En ese sentido, sostuvo que "no hay registros ciertos, no hay maternidades en donde se puedan dar datos. El Estado tiene que abrir las puertas y generar un registro".
Algunos de los objetivos principales de esta ley son realizar exámenes gratuitos de compatibildiad de ADN, asistir en salud mental a las víctimas de supresión o alteración de identidad y generar conciencia social sobre la relevancia de la adopción de niñas, niños y adolescentes.
Asimismo, se creará el Registro Único de Búsqueda Familiar, de Identidad Biológica, de Origen y Socioafectivo, de carácter confidencial y que funcionará en el Ministerio de Salud, Desarrollo Social y Deportes.
El proyecto fue trabajado durante varios meses en la comisión de Derechos y Garantías y, ahora, pasará al Senado provincial para su sanción final.
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