Los trabajadores argentinos conviven a diario con el dilema de encontrar un balance entre su vida personal y laboral. Aunque la prioridad de la mayoría sigue siendo la familia, el trabajo ocupa gran parte de su tiempo, según reveló un informe difundido hoy.
Trabajando.com realizó una encuesta a más de 4 mil trabajadores, de los cuales el 41% respondió que dedica entre 40 y 47 horas semanales al trabajo, mientras que un 39% más de 47 horas y un 20% menos de 40 horas.
En cuanto al tiempo dedicado a la familia, el 35% de los encuestados comparte con ellos más de 20 horas semanales, un 25% le dedica entre 15 y 20 horas; 24% entre 10 y 15 y, en último lugar, un 16% que pasa menos de 10 horas a la semana con su familia.
A pesar del poco espacio que comparten los trabajadores argentinos con sus hijos, padres y maridos, el 59% de los mismos afirma que ésta es su principal fuente de satisfacción, mientras que un 12% señala que para ellos es el dinero.
En tanto, para un 10% lo más importante en su vida es el trabajo, un mismo porcentaje asegura que son sus hobbies y finalmente para un 9% es compartir tiempo con sus amigos.
Trabajar en vacaciones
Por un lado, en relación a la presencia laboral durante las vacaciones, el 68% de los encuestados señaló que esto depende de quién sea el mail ó llamado y sobre qué tema se trate. Un 19% respondió que sí los responde y que no puede dejar de hacerlo. Finalmente, un 13% asegura no contestar ya que ese tiempo es para sí mismo y para su familia.
Un 51% de los encuestados determinó que mientras está en su trabajo no resuelve asuntos familiares, mientras que un 49% reconoce que sí, ya que para ellos es necesario estar atento y colaborar con lo que sucede en sus hogares.
Pablo Molouny, gerente general de Trabajando.com Argentina, recomienda a las empresas tener claro que dedicar más horas al trabajo no significa necesariamente obtener mayor eficiencia".
Cuando un empleado está pasando por problemas en su hogar es muy difícil que éste sea productivo y esté motivado en las horas laborales si no se le permite un balance entre familia y trabajo, o el espacio para que pueda también estar presente en su casa (sobre todo en sus días o tiempos libres), aconseja.
Asimismo, sostuvo que "el trabajador debe ser consciente también de que lo sano es que exista un equilibrio entre ambos aspectos de la vida, ninguno de estos espacios debiese perder la importancia que se merece, pero cada uno tendría que vivirse a conciencia y en plenitud en términos de tiempo y calidad".