La ex presidenta Cristina Fernández recibió hoy la condecoración "Manuela Sáenz" por parte del Parlamento de Ecuador y reivindicó la "Patria Grande", en tanto convocó al progresismo de la región a "analizar las causas de los retrocesos" y preguntarse "qué" se hizo "mal".
"Nuestro gran desafío es analizar las causas de los retrocesos y estas relaciones de fuerzas", sostuvo Fernández de Kirchner, para luego convocar a preguntarse "¿qué hemos hecho mal?".
Para la ex jefa de Estado, "tal vez la muestra más evidente de esta modificación en la relación de fuerzas haya sido que no hayamos podido detener el golpe institucional" que "sufrió" en Brasil la ex presidenta Dilma Rousseff.
Antes del inicio del acto, la ex mandataria señaló a través de su cuenta en la red social Twitter que recibía la condecoración "en nombre de la población de la Patria Grande".
Al destacar su gestión, apuntó que en Argentina "no había despidos, teníamos un régimen de plena ocupación y una política de subsidios en servicios públicos que era estigmatizada, y no quiero ni contarles la que se armó cuando se decidió el tarifazo".
En sus críticas al gobierno de Mauricio Macri, sostuvo que tras el frustrado aumento de tarifas "se dieron cuenta" de que los subsidios eran para "agregar valor indirecto a los salarios, estimular la demanda y sostener la actividad de las pymes".
Además, la ex mandataria compartió una reunión con el presidente de Ecuador, Rafael Correa, en el Palacio de Gobierno. Por otro lado, subrayó que el reclamo de soberanía por las Islas Malvinas "no es argentino, se ha convertido en una demanda regional y global, hay que decirle 'no' al colonialismo".
Fernández de Kirchner fue invitada además a participar de la tercera edición del Encuentro Latinoamericano Progresista (ELAP), donde brindará una conferencia sobre "Situación actual de la Argentina" y "Organización para la Victoria".
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