Por la inflación los consumidores se inclinan cada vez más por segundas marcas y los especialistas en nutrición del departamento de Malargüe, y que se desempeñan en el ámbito estatal, aseguraron que en sus consultorios no recomiendan “marcas, sino alimentos”, explicando por otro lado que “no siempre una primera marca está completa en nutrientes”.
“Muchas veces tenemos familias que no pueden acceder a carnes” por lo que se busca que “otras fuentes de proteínas podemos recomendar como para que reciban ese aporte”.
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La especialista precisó que ante la falta de proteínas que se obtienen de la carne, se pueden complementar con huevo “o bien utilizar legumbres”, que pueden ser preparaciones saladas o dulces, explicó Celeste Bravo.
“La alimentación ha variado mucho, y con distintos alimentos se puede ir reemplazando el aporte de carne”, reveló más adelante, y ante la pregunta sobre un cambio dirigido a la disminución del consumo de carnes, principalmente las rojas.
Segundas marcas en alimentos
Otro tema relacionado a la nutrición es si la segundas marcas aportan los niveles nutricionales que el cuerpo requiere, indicando la nutricionista María Rosa Benegas que no debemos “estar tan atentos a la marca comercial, sino aprender a leer etiquetas y ver que sus primeros ingredientes sean el producto inicial o que da origen a lo que queremos comprar”.
Malargüe-Nutrición y marcas
“A veces caemos en segundas o primeras marcas que no son alimentos fuentes”, aclaró más adelante Benegas, dando como ejemplo a los productos lácteos.
“Recomendamos a la gente que lea las etiquetas y que corrobore, si es un yogurt, que sea de leche”, exhortó, y “no un elemento en base a algo secundario”.
“No recomendamos marcas, sino alimentos”, enfatizó María Rosa Benegas, aclarando que “no porque sea una segunda marca” determina que “sea de mala calidad.