En el Día de la Tierra, el aporte del compostaje en casa.
Foto: Alternativa Humus.En el año 2009, la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas declaró al 22 de abril como el Día de la Tierra con el objetivo de tomar conciencia de que el planeta y sus ecosistemas son el hogar común de la humanidad y para promover un trabajo mancomunado que permita un equilibrio justo entre las necesidad económicas, sociales y ambientales de las generaciones actuales y, sobre todo, futuras.
El compostaje- y el producto que se obtiene: compost- es uno de los aportes que toda persona puede hacer desde la comodidad de su casa, no es necesario tener un patio espacioso ni nada por el estilo, lo que hace falta es una compostera- puede ser comprada o casera- y la información adecuada para conseguir el objetivo que, según explican las personas que saben y lo hacen, es satisfactorio a tal punto que se comparte con otros que también empiezan a mostrar interés.
Para hacer nuestro aporte y conocer el impacto que tiene en el medioambiente y en nuestra salud, hay que comenzar por el principio. Para esto, Zoe Palmes, mendocina al frente de Alternativa Humus, explica el compostaje desde cero e invita a todos/as a sumarse a la práctica.
El compostaje es una forma de reciclaje de los residuos orgánicos y es importantísimo porque no se conocen mucho los efectos de la contaminación ambiental generada por estos.
Generalmente, se asocia lo “orgánico” a una palabra linda, ¿no? Pero en realidad estos residuos son orgánicos porque son biodegradables y tienen alta cantidad de agua, humedad. Esas dos características son las que generan que los residuos se puedan descomponer. Ahora, si es de forma oxigenada, con aire, en un proceso de compostaje está todo bien. Por el contrario, cuando es sin oxígeno empieza a despedir ese olor a podrido y eso está produciendo gases de efecto invernadero como el metano y el sulfhídrico, por ejemplo, que generan calentamiento global.
La realidad es que hoy en día, tiramos estos residuos y terminan en un basural o un vertedero, enterrados. Así, contaminan el aire (por esos gases de efecto invernadero) y, por otro lado, el agua. ¿Por qué? Porque esa agua se va desprendiendo de los residuos y se empiezan a infiltrar en el suelo. Además, cuando están en el basurero se van mezclando con un montón de otros tipos de residuos químicos, electrónicos y después llegan al agua subterránea que se toma en otros lugares de Mendoza, el agua del pozo como le llaman o se usa para riego de hortalizas. La contaminación vuelve.
Compostar es súper sencillo. Se puede hacer dentro de casa teniendo espacio o no. Hay gente que lo hace en su departamento, en cajones plásticos, en composteras comerciales o caseras.
Cualquier persona puede compostar, es un proceso de aprendizaje, hay mucha información en internet para lograr hacerlo bien. Lo que hay que tener en cuenta es que necesitamos generar las condiciones ideales para que esa descomposición suceda con oxígeno.
Entonces, si no podemos comprar un recipiente, lo podemos hacer nosotros mismos. Incluso, puede ser una maceta o un balde. Lo fundamental es que debe permitir la salida de los líquidos por abajo y que ingrese el oxígeno. No puede ser algo cerrado herméticamente porque lo que queremos es que se descomponga en presencia de oxígeno.
Una vez que se empieza, se van incorporando el húmedo y el seco a la compostera. Se recomienda hacerlo de forma modular, entonces cuando se termina de llenar un compost se pasa a otro módulo, o sea, a otro balde. Pueden pasar 3, 4, 5 meses y cuando te das cuenta de que ya no podés identificar qué fue lo que pusiste ahí, cuando tiene un olor agradable, lo ves todo más o menos uniforme y de color marrón oscuro, ese es el momento en el que ya sabes que está listo el compost y ya lo podés utilizar en tus plantas.
Aporta nutrientes al suelo, a las plantas y también aporta vida por los microorganismos que vivían en el compost y eso hace que el suelo sea rico y que las plantas toleren mejor cualquier tipo de contingencia, por ejemplo, algún tipo de plaga. Entonces, eso habla de que tenemos un suelo sano.
Le estamos devolviendo a la tierra de una forma sana. Fijémonos en la naturaleza, por ejemplo, un árbol de manzanas, como en todos, le salen las hojas que en algún momento, cuando llega el otoño se caen, y vuelven al suelo y así la planta vuelve a incorporarlo a través de las raíces. Es un ciclo continuo en donde lo que sale del suelo vuelve al suelo. En cambio, los procesos actuales solamente extraen del suelo, se saca, se exporta y nada vuelve. Entonces, dado que no estamos aportándole material orgánico al suelo de nuevo, se hace a través de químicos.
Alternativa Humus se dedica al compostaje domiciliario y empresarial, enfocándose actualmente en este último. Ofrece diagnóstico e instalación de composteras para empresas, capacitación al personal y un seguimiento del proceso para generar un impacto positivo medioambiental y educativo.
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