El índice de actualización de septiembre se conoció en medio del debate por la Ley de Alquileres vigente.
Foto: Cristian LozanoCon el voto de los bloques opositores (a excepción de la Izquierda y La Libertad Avanza), la Cámara de Diputados de la Nación aprobó el dictamen de minoría y giró al Senado el proyecto que modifica la Ley de Alquileres sancionada en 2020. El oficialismo votó en contra del expediente, ya que presentó uno propio que no obtuvo quórum.
Entre los cambios introducidos, se estableció una actualización del valor de la renta cada cuatro meses (a acordar entre las partes el índice que se aplicará para los aumentos), la duración de dos años del contrato, y una serie de beneficios fiscales para los locadores a fin de incentivar la oferta en el mercado de viviendas para alquilar.
De los diez representantes de la Provincia en la Cámara Alta, seis votaron afirmativamente la iniciativa y cuatro la rechazaron.
Positivamente se pronunciaron los radicales Julio Cobos, Jimena Latorre, Pamela Verasay y Lisandro Nieri; y los diputados del PRO Omar De Marchi y Álvaro Martínez. En contra lo hicieron Adolfo Bermejo, Liliana Paponet, Marisa Uceda y Eber Pérez Plaza, del Frente de Todos.
Básicamente, los primeros coinciden en que era necesaria una derogación de la normativa vigente (para ello requerían el acompañamiento de los dos tercios del cuerpo), aunque valoran los cambios introducidos; en tanto que los oficialistas entienden que el despacho de la mayoría perjudica a los inquilinos.
En diálogo con Sitio Andino, los miembros de cada fuerza justificaron su voto y dejaron algunas impresiones sobre el texto aprobado.
La legisladora oriunda de San Rafael sostuvo que el escenario “ideal” hubiese sido retornar al régimen pre 2020 “y discutir (una nueva ley) en el próximo gobierno, con las nuevas composiciones del Congreso”.
“La problemática de fondo es la inflación pero es una solución parcial y un gran paso porque la ley de hoy no ampara a ninguna de las dos partes; ya que no se contrata o se hace por fuera de ley, generando inseguridad jurídica”, sentenció.
“Están vinculadas, porque una tiende a recuperar el crédito hipotecario hacia adelante y la otra a solucionar los alquileres; mientras tanto la solución de fondo se conseguirá cuando nuestro país alcance la estabilidad económica que tan lejos estamos hoy de conseguir”, subrayó.
Se mostró a favor de los regímenes de incentivos fiscales incluidos, ya que “mejorarán la oferta de viviendas de alquiler” y advirtió que no está asegurado que en la Cámara Alta se obtengan las adhesiones necesarias para convertir la iniciativa en ley.
“La Ley vigente consiguió lo que pocas leyes consiguen, que es enojar a las dos partes: a los inquilinos, porque no pueden pagar los alquileres de acuerdo a la indexación, y a los propietarios que sostienen que pierden dinero por la actualización anual”, concluyó.
“Es una noticia positiva, aun con las dificultades que impone la realidad económica, para quienes necesitan alquilar; e incrementa la oferta”, reparó.
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