La justicia definirá el próximo viernes si Cacho Garay continúa o no detenido en el marco de una causa en la cual está acusado por distintos delitos, entre ellos un abuso sexual y amenazas en contexto de violencia de género.
La justicia definirá el próximo viernes si Cacho Garay continúa o no detenido en el marco de una causa en la cual está acusado por distintos delitos, entre ellos un abuso sexual y amenazas en contexto de violencia de género.
El martes pasado comenzó a debatirse la situación procesal de Cacho Garay, quien fue detenido tras la denuncia de su ex pareja por una serie de delitos ocurridos en la relación. Actualmente está con régimen de prisión domiciliaria, en una vivienda de Coquimbito.
Todo comenzó con una presentación en Córdoba y el 5 de abril la víctima realizó otra denuncia en nuestra provincia. Esa declaración cayó en manos del fiscal de violencia de género, Daniel Carniello, quien ordenó un allanamiento en la casa del sospechoso, en Luján de Cuyo y la posterior detención de Garay.
En esa ocasión, Garay fue imputado por amenazas agravadas por el uso de arma de fuego en contexto de violencia de género y tenencia ilegal de arma de fuego de uso civil –esto luego de que le hallaran escopetas sin autorización-.
Con el correr de los días, la situación de Cacho Garay empeoró, cuando el fiscal amplió la imputación por “privación ilegal de la libertad en contexto de violencia de género y abuso sexual con acceso carnal”.
Fuentes judiciales dijeron que los detalles de la denuncia de la víctima son estremecedores, con respecto al presunto accionar del imputado.
En ese sentido, el fiscal Carniello solicitó el martes pasado que Garay continúe detenido, al entender que hay riesgo procesal y que la denunciante está en peligro si el sospechoso recupera la libertad.
El abogado defensor, Daniel Romero, reiteró la inocencia del imputado y pidió la liberación.
Ahora la decisión la tiene la jueza Alejandra Mauricio, quien este viernes, en horas de la mañana, dará a conocer su dictamen.