Una joven de 22 años denunció por abuso sexual a dos jugadores del club Godoy Cruz Antonio Tomba. Tras varios días, finalmente este miércoles el fiscal Darío Nora los imputó. Ahora arriesgan pena que pueden llegar hasta los 20 años.
Liberaron a los dos jugadores del Tomba que fueron acusados de abuso sexual
Una joven de 22 años denunció por abuso sexual a dos jugadores del club Godoy Cruz Antonio Tomba. Tras varios días, finalmente este miércoles el fiscal Darío Nora los imputó. Ahora arriesgan pena que pueden llegar hasta los 20 años.
La víctima hizo la denuncia a fines de octubre y de acuerdo a las primeras pruebas incorporadas en el expediente, el fiscal de delitos contra la integridad sexual, Darío Nora, decidió imputarlos. Sin embargo, el acto formal de acusación estaba fijado para este miércoles, momento en el que ambos tenían la posibilidad de declarar, aunque decidieron no hacerlo.
Los sospechosos tienen 18 y 19 años, y juegan al fútbol en el club Godoy Cruz Antonio Tomba (en el equipo de Reserva). Ambos fueron imputados por abuso sexual con acceso carnal agravado por la participación de dos o más personas.
“La situación de los chicos es muy grave. La denuncia es muy delicada”, había explicado una alta fuente judicial vinculada al caso.
Pese a la imputación, ambos fueron beneficiados con el mantenimiento de la libertad, aunque deben cumplir con ciertas disposiciones judiciales. Entre los pedidos se destaca una caución de un millón de pesos (individualmente) y deben presentarse ante la Justicia cada vez que se los requiera.
También rige una prohibición de acercamiento hacia la víctima, en tanto que esta incluye abstenerse de enviar mensajes o intentar tener comunicación por redes sociales.
Los hechos ocurrieron en la mañana del 20 de octubre de este año en un departamento ubicado en pleno centro mendocino. Según la denuncia, la víctima estuvo reunida con los acusados en un boliche ubicado en Avenida San Martín y Barraquero, en Ciudad.
Cerca de las 6.15 los tres caminaron hacia el departamento en mención, donde la víctima iba a cambiarse de ropa para ir a trabajar.
Siguiendo con el relato de la damnificada, allí los dos jóvenes comenzaron a besarla y tocarla en sus partes íntimas. Luego la abusaron sexualmente al mismo tiempo y cometieron distintos tipos de vejámenes.
La víctima aseguró que en más de una ocasión intentó resistirse al abuso sexual, y que a pesar de esto (y los gritos) no logró detener el accionar de los individuos. Fue así que tras algunos minutos de ser abusada, logró zafarse y escapó.
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