La UIA insistirá con liberalizar los despidos, prohibidos hasta 2022
La presidencia de Daniel Funes de Rioja al frente de la Unión Industrial Argentina (UIA) tendrá como uno de sus primeros temas de agenda terminar con la prohibición de despidos, o lo que el abogado llama "el cepo laboral". El lobby de la UIA en el Ministerio de Trabajo implicará la presentación de un documento para buscar "medidas transitorias" para permitir los despidos, pero mantener la misma nómina. La primera junta directiva de la gestión Funes de Rioja será el martes que viene, donde volverá a estar Juan Ignacio de Mendiguren.
El 31 de marzo de 2020, el Gobierno prohibió por decreto los despidos y las suspensiones.La medida original era por 60 días, se prorrogó en reiteradas ocasiones y esta semana se extendió hasta el 31 de diciembre, por lo que estará vigente 21 meses. La decisión tomó por sorpresa a los industriales de la UIA, porque consideraban que la medida era para un "momento extraordinario", y la actividad industrial en su mayoría está "normalizada", y hasta en una mejor situación a la prepandemia. Aspiraban a que la medida concluyera el 31 de agosto.
Pero lo que "realmente molestó" fue que la decisión se tomó en medio de un intercambio de propuestas que venían llevando con el Ministerio de Trabajo. El documento presentado a la cartera que conduce Claudio Moroni establecía que, antes de levantarse la prohibición, se llevaran a cabo "medidas transicionales". La propuesta más apoyada por los industriales era que las plantas pudieran volver a despedir, pero a cambio, tener que contratar un nuevo trabajador, para mantener la misma nómina laboral, "sin modificar el listado total del formulario 931".
Uno de los principales temas de agenda de la nueva gestión en la UIA, gobernada por grandes empresas como Techint, Arcor o Ledesma, será mantener el lobby para lograr terminar con la prohibición de despidos y la doble indemnización. El martes que viene será la primera reunión de la junta directiva, lo que sería la "mesa grande", de 82 industriales. Iba a ser este martes, pero Funes de Rioja la suspendió porque tiene coronavirus.
La molestia de los empresarios es que mantienen la misma nómina, con un ausentismo del 25%, lo cual repercute en la competitividad, aseguran. Si bien el decreto establece que no rige para nuevos empleos, los industriales se quejaron que de todos modos la norma "genera incertidumbre". Hasta el momento, la UIA se adjudica haber logrado que el tope de la doble indemnización sea de $500 mil. En su discurso de apertura, Funes había hablado del "triple cepo laboral". Otros industriales piden desdramatizar el discurso: "Con un poquito de muñeca un despido se puede pasar bajo renuncia o mutuo acuerdo, porque la realidad económica es tan dura que se impone sobre lo legal".
Pese a las distintas miradas políticas y económicas, buscarán que reine la paz. Revelan que, en las dos primeras reuniones del comité ejecutivo (la mesa chica), "hubo sintonía". Las pymes consideran que necesitan de una gremial empresaria fuerte y con poder de lobby, como es la UIA, y que encima el Gobierno eligió como interlocutora, dado que las grandes pueden sentarse mano a mano hasta con el Presidente. Las grandes prefieren manejar el poder tras bambalinas y evitar que los conflictos en la tapa de los diarios, por lo que también están en vocación de "no conflicto".
Un foco de fricción con el Gobierno será por los alimentos. Funes es también titular de Copal, el vice Eduardo Nougués es de Ledesma, y el otro vice, Adrián Kaufmann, de Arcor. A mediano plazo, la UIA buscará estudiar proyectos como el de Mochila Argentina de Teddy Karagozian, que ya fue invitado por varias ramificaciones que tiene la UIA en todo el país para exponer por Zoom. Fuente: Ámbito