El jefe de Gabinete, Alberto Pérez, anticipó hoy que el gobierno provincial liquidará el incremento de 21,9 por ciento propuesto para marzo a los docentes y se descontarán los días de paro por la violación de la conciliación obligatoria.
El jefe de Gabinete, Alberto Pérez, anticipó hoy que el gobierno provincial liquidará el incremento de 21,9 por ciento propuesto para marzo a los docentes y se descontarán los días de paro por la violación de la conciliación obligatoria.
"El gobernador (Daniel Scioli) no quiere que los docentes dejen de percibir el aumento que le estamos ofreciendo en marzo, que se cobra los primeros días de abril, por la inflexibilidad de los representantes gremiales", dijo Pérez en declaraciones a radio Mitre.
No aclaró el funcionario si la gestión bonaerense acudirá a aplicar el aumento salarial por decreto o realizará otra herramienta administrativa, pero el aumento estará disponible en los sueldos que se cobran los primeros días de abril.
Los docentes bonaerenses concretaban este martes el décimo día consecutivo de paro ante la falta de acuerdo salarial y el gobierno provincial estaría analizando otorgar el incremento por decreto, dado que este jueves comenzará a liquidar los salarios y quiere contemplar la primera cuota de la suba.
La oferta salarial se mantiene en el 30,9 por ciento en tres cuotas para los salarios iniciales y de entre el 21 y 23 por ciento para los sueldos más altos, de hasta 44.255 pesos de bolsillo, pero los gremios que representan a los trabajadores la rechazan.
Pérez adelantó que en cuanto reciban las planillas de asistencia docente de las escuelas públicas, la administración provincial acudirá a descontar los días no trabajados de cada profesional, caso por caso.
El Frente Gremial Docente Bonaerense (FGDB) convocó a una marcha a la gobernación provincial el miércoles próximo en reclamo de que se mejore la propuesta en la paritaria docente y ratificó que mantendrá las medidas de fuerza hasta tanto su reclamo no sea escuchado.
Además, pidieron una reunión con los presidentes de los distintos bloques de legisladores para plantear que "la educación es un derecho y no un servicio esencial", como pretende declarar el gobierno provincial con la idea de limitar las huelgas para impedir que se corte el ciclo lectivo.
En la administración provincial observan la intransigencia de los gremios con preocupación dado que ni siquiera acataron la conciliación obligatoria y estiman que podría haber una motivación política de algún sector gremial contra las aspiraciones presidenciales del gobernador Daniel Scioli.
En ese contexto, el gobernador bonaerense estaría analizando otorgar por decreto un aumento salarial a todos los docentes, que estaría en línea con la oferta ya conocida que beneficia a los que menos ganan.
La situación se tornó desesperante para cientos de miles de padres de unos 3,5 millones de alumnos que aún no pudieron comenzar el ciclo lectivo 2014 que en la mayoría de las provincias arrancó el pasado 5 de marzo.