Se trata de Felipe Altamirano que cursa ingeniería en la Universidad Tecnológica de Michigan en Estados Unidos, que incentiva a estudiantes de Malargüe a postular a la beca.
Felipe Altamirano en su paso por Malargüe. Sigue comunicándose desde Estados Unidos con interesados en la beca.
Felipe Altamirano es estudiante de ingeniería en Michigan Tech de los Estados Unidos, gracias a una beca que “logro con mucha planificación, esfuerzo y perseverancia”. En forma presencial hace algunos días en Malargüe y remota en la actualidad, motiva a jóvenes para ser parte de un proceso similar en las próximas convocatorias.
Antes de su regreso a los Estados Unidos, Felipe Altamirano mantuvo un encuentro con un nutrido grupo de adolescentes que se vieron interesados en participar como postulantes para las próximas becas que otorga la Universidad Tecnológica de Michigan a estudiantes del departamento de Malargüe. Los selectivos que se avecinan serán en 2025 y 2027, respectivamente.
Felipe contó que desde hace varios meses mantiene contacto con numerosos estudiantes de Nivel Medio que le consultan sobre su experiencia en Michigan, y como ha superado varios obstáculos que se presentan en este tipo de circunstancias, desde el idioma hasta el desarraigo.
El joven estudiante de las ingenierías en computación y eléctrica remarcó varios aspectos que le han sido favorables en los Estados Unidos al momento de cursar en tan prestigiosa universidad, ubicada entre las mejores de ese país. Uno de los principales, que es exigencia, saber el idioma inglés, primero para el cursado; y luego para la interacción social.
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Para lograr avances que permitan la permanencia, como en cualquier universidad del mundo, dijo que cada estudiante, como en su caso, debe tener definidas las metas que se persiguen como profesional y como persona, proyectándolas a un futuro inmediato, fines que son alcanzables con trabajo, dedicación y respeto a la Universidad de Michigan y sus benefactores, que han permitido durante dos décadas becar a estudiantes malargüinos. Esos objetivos proporcionan el verdadero sentido “de lo que buscamos para mejorar” dijo.
Más adelante, y en recientes contactos con SITIO ANDINO, dijo que sigue por estos días reafirmando el compromiso asumido a mediados de agosto en Malargüe con estudiantes que ven esta posibilidad de acceder a la beca, haciéndolo con comunicación transparente a través de todos los medios posibles para evacuar dudas, o motivar a redoblar esfuerzos pensando en los que se avecina para ellos en los próximos meses, la de rendir los exámenes que son excluyentes, los mismos que el debió aprobar en 2022 y que lo llevaron Michigan. Reiteró que los desafíos siempre están hermanados con los logros en la vida.
En otra parte del diálogo indicó que las nuevas tecnologías en comunicación permiten seguir motivando día a día a los “chicos que ven está gran oportunidad”, inculcándolos con ejemplos de sus propias vivencias “que van desde el esfuerzo individual y en equipo”.
A SITIO ANDINO adelantó que ya está diagramando varios proyectos que permitan retribuir en Malargüe el aporte que recibió a través de la beca de la Universidad de Michigan, mencionando asimismo que en estos dos años se ha sentido cómodo y como uno más de una gran hermandad entre sus pares, como también con docentes y profesionales norteamericanos que le han permitido crecimiento y desarrollo personal.
“Hay un gran compromiso con las dos comunidades, con la que me vio nacer y crecer, y ahora con la que me está dando esta gran oportunidad”, señalando que lo más gratificante es poder “ayudar y acompañar a quien lo necesite”, previo a las convocatorias para las becas que serán efectivas en 2026 y 2028.