Entre la adversidad y el aprendizaje

Qué le pasó a Franco Colapinto hoy en Qatar: un viernes frustrante

El piloto argentino, Franco Colapinto, enfrentó un desafío en Lusail con un monoplaza reconstruido, lejos del rendimiento óptimo.

Por Sitio Andino Deportes

Franco Colapinto vivió un viernes complicado en el Gran Premio de Qatar, un día que combinó desafíos técnicos, condiciones adversas y un rendimiento que no cumplió con sus expectativas. El argentino terminó 19° en el único entrenamiento y último en la clasificación para la Sprint Race, en un contexto que marcó una clara desventaja con su compañero de equipo, Alex Albon.

El joven piloto, que corre su penúltima carrera con el equipo Williams, enfrentó dificultades desde el inicio. Con un monoplaza reconstruido tras los choques en Brasil y Las Vegas, Colapinto tuvo que competir con componentes antiguos que afectaron notablemente el rendimiento. “Después de Las Vegas, estamos usando la especificación antigua en la suspensión delantera de mi coche. Hay componentes que no ayudan en nada, y eso lo estamos sintiendo en cada curva”, explicó Colapinto, quien además tuvo que lidiar con el viento cruzado y una pista sucia por la arena del desierto.

Durante el entrenamiento, Colapinto priorizó la acumulación de vueltas en lugar de buscar tiempos rápidos. Fue uno de los pilotos que más giró, completando 29 vueltas, pero no logró superar el 19° lugar. Al intentar una vuelta rápida con neumáticos blandos, perdió control en la grava y no pudo aprovechar el DRS, lo que evidenció aún más las limitaciones del vehículo.

Las limitaciones técnicas que debió enfrentar Franco Colapinto y una brecha que pesa

La clasificación para la Sprint Race fue aún más frustrante. Obligado a usar neumáticos medios, Colapinto finalizó en el último lugar, a más de un segundo y medio del tiempo de su compañero de equipo. “Sentí que fue una vuelta más o menos buena, pero estoy muy lejos y todavía no entiendo bien el porqué. Es frustrante perder una décima o media por curva y no saber cómo solucionarlo”, afirmó el piloto de automovilismo.

El déficit de rendimiento no sólo se debió a las piezas antiguas, sino también a un coche más pesado que el de Albon, lo que complicó su manejo en curvas largas y rápidas, características del circuito de Lusail. “Nos está costando meter velocidad en las curvas largas. Es algo que tenemos que trabajar para mañana”, reflexionó.

Pese a las dificultades, Colapinto dejó claro que está enfocado en aprender y adaptarse a las condiciones adversas. Este sábado largará último en la Sprint Race, con la misión de demostrar su talento en un contexto que lo pone a prueba en cada vuelta./LN.

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