El jefe del Gobierno porteño, Mauricio Macri, calificó este sábado de "muy bueno" que la administración de la presidente Cristina Fernández asuma "las políticas que han fallado" como la seguridad y reclamó que las últimas medidas adoptadas para combatir el delito sean verdaderos "cambios profundos".
Además, sostuvo que la "discusión" de mano dura o blanda ya "se agotó", por lo cual pidió que "lo importante es que se venga una buena gestión e interactiva entre jueces y policías con la prioridad de cuidar a la gente".
Macri se refirió así a la decisión del gobernador Daniel Scioli de nombrar como ministro de Seguridad provincial al intendente de Ezeiza, Alejandro Granados, y dejar a Ricardo Casal al frente de la cartera de Justicia, según publica el portal de noticias Minutouno.
Ante las recientes políticas tomadas por el oficialismo en la lucha contra la delincuencia, Macri destacó: "Necesitamos un proceso de inversión de las demás fuerzas de seguridad, volver a jerarquizarlas, equiparlas y que haya un buen salario, para que tengan una motivación y que cuenten con el respeto de la sociedad".
En declaraciones radiales, puso como ejemplo a la Policía Metropolitana, al señalar que es "una experiencia exitosa que uno puede ver".
"La Policía Metropolitana habiéndola entrenado, equipado bien, pagándoles buenos salarios. Es un lujo, funciona muy bien, la gente está contenta y quiere más Metropolitana. Nosotros tenemos 5 mil policías y vamos por 15 mil efectivos", enfatizó.
Para Macri, en la ciudad de Buenos Aires hay "una tendencia" por parte del Gobierno nacional de ir "hacia la inversión" operativa de la Policía Federal.
"Vemos un compromiso de que se volvió a invertir, equipar y respetar a la Policía Federal, con lo cual empieza verse una mejora, mientras que la provincia de Buenos Aires todavía la cosa viene peor", analizó el jefe comunal.
Al ser consultado sobre los cambios anunciados para intensificar la lucha contra el delito por parte del gobierno de Fernández de Kirchner y el del bonaerense Scioli se enmarcan en un reconocimiento a fallas que se han tenido, Macri respondió: "Creo que ante los fracasos que viene teniendo en la política energética y de seguridad creo que sí".
"Es bueno que asuman que la políticas han fallado y que hay que corregirlas, me parece muy bueno", aclaró Macri, quien insistió en que hay que "invertir en las fuerzas de seguridad".
Luego, ante la designación de Granados en el Ministerio de Seguridad bonaerense y el gran despliegue de gendarmes en el conurbano, Macri planteó: "Lo importante es que se venga una buena gestión, interactiva entre jueces y policías con la prioridad de cuidar a la gente".
"Creo que esa discusión se agotó hace una década de mano dura o mano blanda, lo importante es que hagamos respetar la ley, para el pobre tipo que escucha esa discusión dice: 'déjense de joder'. Basta con estos cuentitos de qué tipo de mano es", recalcó Macri.
Finalmente, abogó para que la Policía "cuente con el respeto de la sociedad", porque es necesario "restablecer un cierto equilibro", ya que no puede ser que "en una manifestación" a un miembro de una fuerza de seguridad, "lo fajen".