Además, Anabella se refirió a su prima, Romina Martínez, quien era pareja de Cardozo al momento del asesinato de su propia hija, su hermana y su abuela, y lo perdonó.
"Está loca", dijo esta mañana, tras lo cual agregó: "La última vez que la vi fue hace dos o tres días en la calle y su reacción fue mirarme y reírse. Fue lo único que hizo".
"Ella se fue a vivir a la casa de los padres de Cardozo y no supimos más nada de ella porque no quiere hablar con nosotros. No sabemos qué le pasa, pero yo creo que está manejada por él y su familia.
"Cuando pasó todo, ella dijo que no lo iba a perdonar nunca, que le había arrancado un pedazo de su vida. Pero hoy está embarazada de él. Le mató a una hija, a la hermana y a la abuela...", señaló.
Por otra parte, aseguró que, por lo que le adelantaron los abogados, "Romina es querellante en el juicio y va a ir en defensa de él. No sé qué va a pasar adentro, porque en realidad es algo indefendible".
En principio, el juicio está previsto para hoy y mañana, ya que con, la intervención del fiscal Ricardo Juan, declararán alrededor de 31 testigos.
Los más importantes son los peritos psiquiatras, ya que para la fiscalía está probado que Cardozo comprendía la criminalidad de sus actos, pero la defensa oficial intentaría demostrar que no fue así.
"No es un psicótico, no alucinaba pese a que diga que cuando ocurrió el hecho había una voz que le hablaba", dijo una fuente judicial consultada.
El triple crimen se registró el 27 de agosto de 2012 en una casa de Uruguay 633, en Benavídez, partido de Tigre, cuando Cardozo fue a buscar a su ex mujer, Romina Martínez (27), quien lo había abandonado una semana antes y se había llevado con ella a la hija de ambos, de 3 años.
Cardozo no encontró a Romina en la vivienda y descargó su furia contra las tres familiares de ella: primero asesinó de veinte puñaladas a la abuela de la chica, Nilda Ludovica Ham (76) y luego a la hija, Marisol (6), que estaba durmiendo y fue ahorcada.
Poco después llegó a la casa la hermana de Romina, María Florencia Martínez (15), quien pasó por allí para darle remedios a la su abuela.
Según lo que demostraron los peritajes, Florencia intentó defenderse -se halló ADN del agresor debajo de sus uñas y a él se le encontró un arañazo- y luego fue asesinada también de una veintena de puñaladas.
El imputado fue grabado por las cámaras de seguridad del municipio de Tigre cuando huía de la casa, por lo que fue detenido y confesó los crímenes.
El martes pasado, Romina, que al momento de los crímenes estaba viviendo en la casa de sus padres, ubicado al lado de la de su abuela, dijo que lo perdonó, que espera un hijo de él y pidió que en el juicio no lo condenen porque al momento del hecho "estaba poseído".
"Para mí no fue él, no lo hizo porque él quiso, algo se apoderó de él y usó su cuerpo", sostuvo la joven, que ya tiene una nena con el imputado.
Fuente: Online 911
Con 31 testigos comienza el juicio contra el hombre que mató a la familia de su mujer
Se trata de Juan Carlos Cardozo, de 25 años, quien hace un año mató a puñaladas a la hermana, abuela e hija de su pareja en la localidad bonaerense de Benavídez.