Una jornada complicada vivieron efectivos policiales cuando intentaban reducir a un grupo de ladrones que cometieron ilícitos en Malargüe y Guaymallén.
Una jornada complicada vivieron efectivos policiales cuando intentaban reducir a un grupo de ladrones que cometieron ilícitos en Malargüe y Guaymallén.
El primer hecho ocurrió a las 21 en las inmediaciones de calle Ingeniero Barrera y Olascoaga. Allí los efectivos Marcelo Pone Fúnez y Fabiana Urrutia identificaban a un grupo de aprehendidos, cuando de repente aparecieron otros hombres con quienes comenzó un forcejeo. Los recién llegados arrojaron piedras hacia los uniformados y las movilidades. Como consecuencia Ponce sufrió politraumatismos en su cabeza, mientras que su compañera fue herida en la mano derecha.
Por su parte, el móvil presenta roturas en la puerta trasera y en el visor y tres personas, una de ellas de 16 años, quedaron detenidas.
A la misma hora, pero en Guaymallén, un hecho similar ocurrió cuando un efectivo fue agredido con un hierro por un padre y un hijo que intentaban escapar tras un robo.
En calle Avellaneda y Gutenberg, Emanuel Cortinez (21) y su padre Antonio (42) eran perseguidos por la policía y lograron ser reducidos cuando ingresaron a un taller mecánico.
Allí los hombres con un hierro intentan agredir al personal uniformado causándole daños a
la moto, que sufrió la rotura de baliza y guiñe delantero. Por su parte, el auxiliar Edgardo Ortega padeció lesiones leves. Al momento de subir al móvil, el menor de los detenidos, con las
esposas colocadas, le intenta arrebatar el arma reglamentaria al efectivo y escapa corriendo, aunque metros después fue aprehendido.