8 de agosto de 2011 - 17:13
María Fernanda Cañizares, la joven detenida en la causa por el crimen de las turistas francesas, aseguró ser inocente y dijo que recibió la cámara y teléfono de las mujeres como un regalo sin saber a quién pertenecían, mientras su hermano Federico se abstuvo de declarar.