El Ministerio Público Fiscal de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires resolvió archivar la causa por "lesiones leves dolosas, agravadas por tratarse de su cónyuge y por mediar violencia de género" que pesaba desde 14 de abril pasado contra Eduardo Salvio. Así, el delantero de Boca quedó libre de culpa y cargo.
"Falta de prueba sobre la materialidad del hecho". Así se titula el fallo firmado por el fiscal de 1ª instancia José Ernesto Sylvié, quien resolvió cerrar el proceso que tenía como protagonistas al delantero de Boca y a su ex mujer, Magalí Aravena, por el episodio ocurrido en Puerto Madero, en la intersección de la avenida Azucena Villaflor y Juana Manso.
¿Qué ocurrió? De acuerdo a la reconstrucción que hizo la Fiscalía, "Aravena observó al vehículo conducido por el imputado (Salvio) y se acercó a los fines de entablar un diálogo, colocándose delante del rodado. Por su parte, el imputado avanzó y la mujer, para evitar ser arrollada, se corrió hacia un costado y se sostuvo de la ventanilla trasera del lado derecho del acompañante. Aún a sabiendas de ello, el imputado realizó maniobras para avanzar y dar marcha atrás al vehículo, provocando que la mujer cayera al suelo, oportunidad en la que le produjo un corte de 30 centímetros en el pantalón y un traumatismo a la altura de la rodilla derecha".
Una vez iniciada la investigación se dispusieron distintas medidas de prueba con la intención de esclarecer los hechos denunciados. A la par, la Fiscalía dio intervención a la Oficina de Asistencia a la Víctima para que el personal especializado en violencia de género mantuviera una entrevista con la denunciante y elabore un informe para verificar los indicadores de vulnerabilidad.
Sin embargo, Aravena no respondió a los llamados y tampoco se hizo presente los días 4 y 12 de mayo en la Fiscalía para instar a la acción penal contra Salvio. Las dos veces solicitó la suspensión de las audiencias y el 10 de mayo envió un escrito donde desistía de avanzar en lo penal "teniendo en cuenta el interés superior de proteger a mi familia en su totalidad". En el mismo documento Aravena requirió que "se mantengan las medidas cautelares oportunamente dispuestas".
Salvio tenía prohibido acercarse a 300 menos al domicilio donde se encontrara la mujer y no podía tener contacto con su ex esposa por ningún medio, salvo cuando se tratara del cuidado de sus hijos, y para lo que debía asignar a "una persona de confianza en común".
Fuente: Olé.com
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