Claudio "Chiqui" Tapia vive tal vez sus horas más difíciles al frente de la AFA: a partir de la próxima semana, la Inspección General de Justicia (IGJ) deberá dictaminar si es válida la asamblea que lo reeligió como presidente de la Asociación del Fútbol Argentino.
Si la IGJ entiende que existieron irregularidades, tal como creen y denunciaron Nueva Chicago y San Martín de Tucumán, la entidad se vería obligada a celebrar nuevas elecciones para elegir autoridades para el período 2021-2025.
Debido a las restricciones por la pandemia, el año pasado la AFA reeligió a Tapia en una asamblea virtual que respaldó a una lista única para comandar los destinos de la entidad hasta el 2025. La votación, por entonces, se realizó de manera remota teniendo en cuenta la situación sanitaria del país. La IGJ aprobó la realización del cónclave vía Zoom, pero nunca validó posteriormente lo resuelto por la asamblea.
La decisión que tomaría la IGJ en los próximos días se da luego de una presentación del abogado del equipo tucumano ante el Juzgado Civil N° 59 a cargo de la magistrada Mariana Callegari por ineficacia del acto eleccionario.
Son varios los puntos señalados como "irregulares" en la asamblea virtual. Las denuncias de Chicago y San Martín apuntan a que la convocatoria no detalló cómo debían conectarse los representantes de los clubes y que los delegados no dejaron constancia de haber recibido la misma. Al mismo tiempo, remarcan que no existen referencias a los miembros ausentes -algo que estipula el artículo 42 del reglamento general de AFA donde se especifican las votaciones. Y subrayan que la votación fue por aclamación tras una moción de un directivo y en el acta no surge "ninguna descripción de la modalidad bajo la cual se adoptó la decisión de pasar a votación por aclamación ni la cantidad de votos con la cual se configuró la mayoría absoluta". Todos motivos que podrían darle herramientas a la IGJ para dar por caída la elección.
La resolución que tomaría la IGJ se da en momentos en los que el apoyo a Tapia y su gestión no es tan granítico como en sus inicios. No sólo los clubes sentenciaron a Tapia, la política también ya lo da como el pasado. Ni siquiera el triunfo en la Copa América modificó su realidad.
Pero, ¿cuáles serían los pasos a seguir, en el caso de invalidar la reelección? La entidad debería convocar a asamblea para elegir nuevas autoridades, mientras una Comisión provisoria se encargaría de las decisiones del día a día hasta ungir un Comité legalmente respaldado. Y la Justicia Civil, a su vez, continuaría con el proceso tras la decisión de la IGJ.
Ante la hipótesis de un nuevo llamado a elecciones, Tapia quedaría fuera de combate. Para reemplazarlo hay seis posibles candidatos: Marcelo Tinelli, Rodolfo D'Onofrio, Nicolás Russo, Víctor Blanco, Juan Sebastián Verón y Cristian Malaspina.
Marcelo Tinelli
Hoy es presidente de la Liga Profesional. En diciembre se rompió su alianza con Tapia. Desde ese momento, visita regularmente a Alberto Fernández para tener el visto bueno del Gobierno para comandar la AFA. Según trascendió, Tinelli sería avalado por Alberto Fernández, aunque le dijo que no va a interceder.
Tapia nunca fue bien visto por el gobierno nacional, dado que sus componentes asocian su llegada al poder a su alianza con Daniel Angelici y al beneplácito del entonces presidente Mauricio Macri.
Pero Tinelli es resistido fuertemente por Boca y otros clubes de la Liga y también del Ascenso.
En lo que algunos llaman su peor momento en la TV, cree que el ser presidente de AFA le puede dar el salto que necesita hacia la política, algo que hoy desde la pantalla no lo consigue.
Sin embargo, en La Cámpora no digieren aún su candidatura y Sergio Massa le dio un "sí" condicional (no es su preferido). El conflicto con Boca por el escandaloso partido en Brasil ante Mineiro lo volvió a enfrentar con la AFA. En el club de la ribera lo acusan de haber intervenido para evitar el corredor sanitario que ofrecía el Poder Ejecutivo.
Rodolfo D'Onofrio
Existe una vieja tradición no escrita que dice que ni el presidente de River ni el presidente de Boca pueden comandar la AFA. Pero para D'Onofrio eso no es relevante. Dejará en diciembre la presidencia del club de Núñez y su sueño es emular a su padre: Raúl D'Onofrio fue interventor de la entidad madre del fútbol argentino en 1971.
De buen vínculo con Alberto Fernández, también tiene el visto bueno de Sergio Massa. Sin embargo, carece de relación con Cristina y Máximo Kirchner. Aseguran que muchos dirigentes que no lo toleraban hoy no lo ven tan mal. En la intimidad ya tuvo reuniones con otros dirigentes y, por primera vez, aseguró que quiere ser el mandamás de la asociación.
Nicolás Russo
Es presidente de Lanús y precandidato a diputado provincial por el Frente de Todos. Es el principal candidato de SergioMassa para presidir la AFA.
Juan Sebastián Verón
Curiosamente es el único que tiene el visto bueno de las tres fuerzas del oficialismo. Alberto Fernández, Sergio Massa y Máximo Kirchner respaldarían su candidatura. Lo ven como un hombre con mundo, con una buena gestión en Estudiantes y sin conflictos grandes en el fútbol.
Su déficit es que se relaciona poco con sus pares. No va a reuniones en AFA, la Liga Profesional o Conmebol. Muchos en el ambiente del fútbol lo tildan de "soberbio". Pero su nombre surgió sorpresivamente cuando la relación de Tapia con un sector de La Cámpora se enfrió considerablemente.
Víctor Blanco
Es el preferido de Máximo Kirchner y de CFK. Desde que asumió la presidencia de Racing forjó buenos vínculos con el kirchnerismo, pero también con otro actor político pensando en el futuro: el racinguista Horacio Rodríguez Larreta. Lo consideran "el candidato ideal" porque reuniría todas las condiciones. Incluso, dentro del fútbol se lo considera el más capaz y prolijo de todos.
Cristian Malaspina
El presidente de Argentinos Juniors es el último que quiere ponerse el traje de candidato. Hoy es vicepresidente de la Liga Profesional y fue clave en el conflicto con Boca por la no postergación de partidos. Tiene ida y vuelta con Alberto Fernández, pero asegura que el Presidente también lo bendijo. Malaspina no oculta sus ganas mientras ve que Tinelli se debilita. Fue el que se enfrentó directamente con la dirigencia de Boca. Sus cruces telefónicos con Juan Román Riquelme fueron la comidilla de todos.