El Plan de la Mariposatiene canciones que dicen, por ejemplo: ¿Vendrá algún instante de mini lucidez/ Que nos muestre lo infinito de la vida?/ Habrá tal vez ahí el florecer de un nuevo amor/ La siembra de nuevas energías (María). O también: Tengo una muralla de ladrillos/ Rotos espejos, quemados brillos/ También tengo el corazón abierto/ Por eso canto, o me reviento (Oro de abeja). Forman parte del disco"Estado de enlace", el quinto material de estudio de esta banda que después de mucho encierro tomó el riesgo de salir a la ruta para encontrarse nuevamente con la energía de su público.
Es un disco poderoso. Un viaje al interior del ser. Además de una experiencia celebrativa -dice Sebastian Andersen- porque con este trabajo el grupo alcanzó una calidad sonora que estaba buscando hace tiempo.
"Cuando nosotros arrancamos no es que éramos hijos de alguien que se dedicaba a la música, ni tuvimos nadie que nos explique esto sea hace así o asá, lo fuimos descubriendo en el camino y eso en un principio cuesta porque querés grabar, querés que suene de una determinada manera y tenés que aprender a hacerlo y ese proceso lleva su tiempo. En este caso con este disco sentimos que se acercó mucho a lo que estábamos queriendo plasmar en sonoridad. En ese sentido es un disco celebrativo en ese aspecto, no sé si existe esa palabra, pero que agradecemos y estamos contentos como suena, como está arreglado, la forma independiente como lo hicimos, con nuestros oídos y nuestras manos. Es un disco que le tenemos un cariño muy particular".
El Plan de la Mariposa es una hermandad en un sentido literal. Además de Sebastián Andersen en la voz, la banda está integrada por Valentín Andersen en guitarra y voz, Máximo Andersen en teclado, Santiago Andersen en violín y la única mujer de este proyecto colectivo, Camila Andersen -también en la voz-. Aunque el cuadro del septeto se termina de completar con dos amigos hermanos: Julián Ropero en batería y Andrés Nör en el bajo.
Agradecimiento. Esa palabra se repite como un mantra. La formación oriunda de Necochea y que desde hace tiempo hace base en la Capital del país, está atravesando un muy buen presente. Sus canciones llegan a la gente, las tocan, las transforman. En Mendoza solo estuvo una vez en el marco de la apertura de un bar, según recuerda Sebastián, pero ahora si la pandemia lo permite el destino previsto es el Teatro Independencia el 25 de abrily General Alvear el 23.
Con un rock eclético y siempre apostando a la experimentación, el camino que le da sentido al proyecto es ese que está impulsado por el latir interior. Desde ahí sus integrantes se ponen en marcha y se sostienen.En un entrevista telefónica desde Rosario, ciudad donde tocó recientemente El Plan, Sebastián habla de esto y de la experiencia Demos en Aislamiento. Un material que la banda creó junto a sus seguidores cuando el mundo que conocíamos cambiaba para siempre, es decir, cuando un virus nos encerró a todos en una cuarentena estricta.
-Están de gira por distintos puntos del país. ¿Cómo están viviendo la experiencia de depender de la situación actual y de la incertidumbre por la pandemia? Tomaron un riesgo.
-Para variar... Qué se yo, ahora se está volviendo a complicar la cosa lamentablemente con la segunda ola, pero también estamos muy agradecidos porque a finales de enero pudimos volver a tocar después de tanto tiempo de estar parados. Eso por un lado. Además es lo que nos apasiona, es lo que amamos hacer y después también porque es nuestro trabajo. Y no solo el nuestro sino también el de mucha gente, familias y personas que nos rodean y que trabajan con nosotros. Así que contentos de volver a la gira, de volver a tocar. Venimos de hacer un montón de fechas muy hermosas, recibiendo un montón de amor de toda la gente que viene a ver El Plan, que se conecta, que se copa con la propuesta que tenemos.
En un principio estamos agradecidos y después de la incertidumbre no queda otra. Me parece que hoy por hoy nadie escapa a eso. Yo considero que la incertidumbre está casi siempre y después el ser humano trata de inventar estructuras para sentir que tiene bajo control lo que en realidad no tiene control, pero en este caso se potencia un poco más. Está bueno tratar de hacer, de darle un espacio adentro de cada ser y aceptar lo que viene, como viene y no resistirnos demasiado porque es una posición incómoda para todos los sectores de la sociedad. Obviamente para la música, pero ni hablar para los médicos y también para los políticos más allá del color partidario. Creo que hoy es un momento muy complejo para toda la sociedad Argentina. Yo me armo de paciencia y las oportunidades que vengan las agarro y tomar lo mejor que se pueda de cada cosa. Y lo que no se pueda hacer bueno, no se podrá hacer. Esto ya va a pasar y vamos a volver a girar y a hacer fechas que estoy seguro que va a ser así.
Yo considero que la incertidumbre está casi siempre y después el ser humano trata de inventar estructuras para sentir que tiene bajo control lo que en realidad no tiene control, pero en este caso se potencia un poco más. Está bueno tratar de hacer, de darle un espacio adentro de cada ser y aceptar lo que viene, como viene y no resistirnos demasiado porque es una posición incómoda para todos los sectores de la sociedad. Obviamente para la música, pero ni hablar para los médicos y también para los políticos más allá del color partidario. Creo que hoy es un momento muy complejo para toda la sociedad Argentina.
-¿Cómo fue ese reencuentro con el público después de tanto encierro?
-Fue muy hermoso, estábamos con muchas ganas. Imaginate que nosotros hace varios años que todos los fines de semanas y a veces también entre semana, que salimos de gira y nos hemos acostumbrado mucho a eso y nos gusta mucho, es el mejor trabajo del mundo para nosotros. Es una tarea que sentimos que hacemos que tiene un fin, un objetivo, un concepto y el sustento para que llene nuestras vidas así que no hacerlo fue por un lado duro, pero por otro hicimos otra cosa. No es que estuvimos cruzados de brazos esperando que todo pase. Hicimos shows por streaming, grabamos videos e hicimos canciones nuevas. Estuvimos activos pero nos faltaba eso que es salir a viajar, salir al encuentro de las personas, así que alucinando. También que en los lugares entran el 30% o 50% del lugar, pero eso no se sintió para nada porque había una ganas de reencontrarnos que hubo mucha energía igual. Hicimos fechas en Mar del Plata, en Necochea que fueron fechas muy cargadas de energía. Anoche en Rosario, que es donde estoy ahora también fue una fecha muy hermosa.
-Y la relación con Mendoza, cuántas veces han venido?
-Fuimos una sola vez, no recuerdo bien pero para mí que hace dos años más o menos. Fuimos a un bar que recién abría que no recuerdo el nombre pero era muy lindo.
-Y ahora tocan en sala más importante que tenemos. Digo, hay un salto.
-Sí, me vienen contando que está muy bueno el teatro. Eso también, tomando este contexto, de repente estamos tocando bastante en teatros. No tocábamos tanto en teatros porque priorizábamos el hecho de bailar, el pogo, la cosa más corporal. Y ahora tocar en teatros es hermoso, es alucinante. Esos lugares en los que decís acá no puedo pifiar una nota, están hechos para eso.
No tocábamos tanto en teatros porque priorizábamos el hecho de bailar, el pogo, la cosa más corporal. Y ahora tocar en teatros es hermoso, es alucinante.
-Sí, los teatros tienen una mística. Son espacios sagrados de las artes.
-Sí, son templos del arte, van pasando cosas artísticas quizás hace 100 años, es fuerte eso. Creo que los espacios se cargan de energía. Como cuando entrás a una casa en donde se pelean todo el día y se siente una vibra que no está buena, también cuando entrás a un lugar donde las personas tienen una armonía zarpada lo sentís. Eso también lo sentía cuando entrás al teatro. Bah, yo creo en eso.
-Hablando de esa energía zarpada pensaba en el disco Estado de enlace y como se escuchó durante el encierro. Las canciones provocaron algo en el momento que estábamos atravesando. ¿Cómo lo vivieron ustedes?
-Primero con agradecimiento, es algo que es hermoso. Nosotros que hacemos canciones que después esa canción resuene en otro ser y que le ayude eventualmente en algunas situaciones es lo más lindo porque la canción toma su propio viaje, una energía, un poder que si se quiere ya es propio que ya no tenés nada que hacer más que dejarla que haga su recorrido. Eso es lo más lindo y el criterio que tenemos para decidir si las canciones van o no van en un disco tiene que ver con eso, que nos movilice algo a nosotros mismos en principio. Que nos mueva una fibra que nos genere algo internamente. Eso es siempre lo que es más fuerte para la decisión de si una canción termina entrando o no en un disco, porque obviamente hacemos un montón da canciones más que después no terminan entrando.
También creo que la poesía tiene ese poder de reinterpretación. Nos pasa que una canción la hicimos por alguna razón particular y que después otra persona la conecta con otro viaje, y eso también alucina porque quiere decir que está viva. En ese sentido nos pasó que cuando pasó lo del ARA San Juan teníamos nosotros una canción que se llama Mar Argentino que la habíamos hecho antes y que no dice nada del ARA San Juan -naturalmente-, pero sí habla del mar, de las despedidas. Y de repente nos pasó que algunos familiares la tomaron como una canción que los ayudaba a travesar el momento y eso también modifica la propia canción tal cual la tocábamos. La hemos tocado en Mar del Plata y ya no es lo mismo después de esa situación, también se resignifica para nosotros mismos. Ese ida y vuelta con el público para la gente que le copa El Plan es muy importante y le damos mucha bola, contestamos todo lo que podemos en las redes y estamos con ellos a pleno.
Nosotros que hacemos canciones, que después esa canción resuene en otro ser y que le ayude eventualmente en algunas situaciones es lo más lindo, porque la canción toma su propio viaje.
-Ser familia y coincidir en el camino de la música. Tener un proyecto y que los mantenga unidos en el tiempo, ¿cómo lo logran? ¿Algo justifica esta sincronicidad que tienen?
- No sé como lo logramos. Estamos juntos y sucedió, se fue dando. Creo que es esto que hablábamos de ese feedback que a veces como suele pasar muy seguido con las personas que escuchan El Plan, que nos devuelven sus vivencias de las canciones. O de repente que tienen una persona querida que está pasando un momento difícil y que las canciones lo ayudan, o que se vinculan con un hermano porque despezaron a escuchar El Plan. Digo, este tipo de historias que nos llegan le da sentido a la tarea y responde un poco a la pregunta para qué estamos haciendo lo que estamos haciendo. Y es una pregunta que es muy bienvenida para hoy donde tantas veces hacemos tantas cosas que no sabemos ni por qué las estamos haciendo ni para qué las hacemos. El para qué las hacemos yo considero que es una pregunta que vale mucho la pena hacerse en este tiempito que estamos acá en la tierra. Esas son las cosas que nos nutren y las que nos hacen sentir que vamos por un camino que aporta algo, que colabora en la humanidad, que le da valor a las cosas que para nosotros tienen valor. Cuando me decís qué cosas hacen que se sostengan El Plan me parece que son ese tipo de cosas.
-Quería preguntarte sobre las letras de las canciones. Musicalmente la banda suena muy bien, pero las letras también son muy poderosas. ¿Cómo trabajan esta parte?, ¿las escribís vos, surgen colectivamente?
-Yo escribo bastante pero mis hermanos escriben también. Muchas veces tenemos partes y si estamos encima de eso y si uno tiene una letra y la va sacando y poniéndola frente a los demás, ahí compartimos 'che esta parte me parece que tal vez podría decirse de tal manera' o revisemos este pasaje o 'que bueno que está este momento'. No es algo que no se charle porque para nosotros nos parece una parte re importante no solo de la música que hacemos sino también de la música que escuchamos. Sentimos que por algo está ahí y es una oportunidad de comunicar cosas. No sé, quizás hay gente que escucha música y no le da bola a las letras, pero yo siempre le di bola a las letras y si hacemos canciones me gusta que digan cosas y que me muevan desde ese lugar también.
-Hablemos de "Demos en Aislamiento". Fue una creación distinta con sus seguidores, ¿por qué decidieron hacerlo así, cómo fue esa experiencia?
-Fue la noche que estaban anunciando eso. Dijimos 'che, mañana hagamos un experimento y hagamos acciones junto con la gente, total está cambiando el mundo no sabemos que va a pasar'. Era un momento muy particular que te lo debés acordar, que era un cierre total. Fue muy intenso, muy particular y dijimos hagamos un registro musical de esto ya que vamos a estar encerrados, hagamos algo artístico de esto. Fue una experiencia interesante. La modalidad fue así, una transmisión en vivo en todas las redes sociales que tenemos a disposición y a través de esas redes decíamos a ver hoy trabajemos algún concepto como por ejemplo "qué le agradecerías a esta situación" o "a qué le tenés miedo". Fue un concepto por día y bajo ese tópico que tirábamos la gente empezaba a escribir cosas y nosotros también. Con todo eso armamos letras. La idea era hacer como una foto del momento escrita pero que no sea una opinión de nosotros sino algo que fuera una construcción colectiva.
-¿Qué puede esperar la gente que le gusta El Plan acá en Mendoza?
-Creo que si les gusta El Plan de la Mariposa van bien porque vamos a tocar las canciones que hacemos y que van con una apuesta en escena potente. Y tenemos muchas ganas de tocar y de compartir y de tener un momento de celebrar la vida por un rato. Así que creo que eso lo van a disfrutar mucho. Y a la gente que no conoce El Plan espero que también sea una oportunidad, una experiencia para que sea el descubrimiento de un movimiento artístico que desconocen y que por ahí les puede resultar atractivo. O no , qué se yo.
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El Plan de la Mariposa presentará el disco "Estado de enlace" el 25 de abril en el Teatro Independencia.