Un octogenario que el mediodía de ayer estaba almorzando junto a familiares en su casa de calle Upaeca, de la ciudad de General Alvear, murió atragantado al obstruirse sus vías respiratorias con un alimento.
Un octogenario que el mediodía de ayer estaba almorzando junto a familiares en su casa de calle Upaeca, de la ciudad de General Alvear, murió atragantado al obstruirse sus vías respiratorias con un alimento.
Los familiares sorprendidos por la situación vivida trataron de auxiliar al adulto, pero al resultar infructuosa la maniobra de extraerle el alimento, llamaron a personal idóneo que tampoco logró su cometido al practicarle RCP, por lo que dejó de existir en el lugar.