El jefe de Estado llegará el sábado al lugar del desastre junto con su ministro de Defensa para decidir desde el terreno los pasos a seguir para "aminorar el sufrimiento" de los familiares de las víctimas.
Mientra tanto, Bolsonaro ya creó un "comité de crisis", integrado por los ministros de Energía y Medioambiente, para que lo asesoren en la toma de decisiones para intentar controlar los efectos de la avalancha.
El hecho ocurrió en Brumadinho, a 60 kilómetros de Belo Horizonte, capital de Minas Gerais. La minera expresó en un comunicado que su "prioridad total es preservar y proteger la vida de empleados e integrantes de la comunidad", aunque no es la primera vez que Vale está en el ojo de la tormenta por un desastre similar.