Luego de que se suspendiera por cuestiones climáticas el día viernes, la Vendimia de Maipú tuvo su gran noche este sábado en el Parque Metropolitano Sur. Miles de vecinos acompañaron la celebración que conjugó Bendición de los Frutos, espectáculo artístico y coronación de la nueva Reina departamental.
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Esto último, fue sin dudas el gran momento de la noche, ya que se vivió una elección inédita entre las candidatas que se disputaban el cetro de Florencia Mosschetti. La votación dio por ganadora con igual cantidad de sufragios (33), a la joven del distrito de Rusell, Florencia Martínez y; a la belleza del distrito Ciudad, Romina Silioni.
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La suerte acompañó a Romina de Cuidad, que se consagró como la nueva reina del municipio. |
Finalmente fue el azar el que terminó de definir el destino real de las dos jóvenes, ya que el empate se resolvió por bolillero. Y fue Romina de Ciudad, quien extrajo la bola con el número más alto. De esta manera, la rubia de ojos verdes y estudiante de Abogacía se convertía - entrada la madrugada - en la nueva esperanza vendimial del departamento.
Entre caras de sorpresa y gritos de apoyo, dio su primer mensaje como reina electa: Quiero dedicarle esta elección a los verdaderos hacedores que son los trabajadores y como vimos en esta fiesta, no hay que perder la tradición. Yo voy a luchar por eso. Gracias y feliz Vendimia para todos.
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El Gobernador Pérez y el Intendente de Maipú, Alejandro Bermejo junto a las nuevas soberanas del departamento. |
Entre los invitados que se hicieron presentes, estuvo el Gobernador Francisco Pérez, junto a gran parte de su gabinete ministerial y, la Reina y Virreina Nacional de la Vendimia. Las bellezas reales fueron las encargadas de acompañar el cambio de atributo de la nueva soberana.
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La Riena Nacional de la Vendimia, Gabriela Koltes y la Virreina, Florencia Moralla, disfrutaron de la noche. |
Una historia simple contada con gran despliegue
Vendimia de una herencia, es el nombre que llevó el espectáculo artístico dirigido y guionado por Laura Fuertes, Pablo Moreno y Fabián Sama. El trío supo desplegar durante una hora y media una historia sencilla pero contada con un gran despliegue de bailes y atractivas propuestas musicales.
Se le sumaron a lo tradicional, chispas del género music hall. Esto se disfrutó a través de algunas canciones y la puesta coreográfica. Con acierto, el complemento fue el colorido del vestuario y la escenografía de grandes dimensiones con una pantalla led central a modo de tonel.
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En el rescate por la esencia y la tradición, no faltaron los cuadros folklóricos ni de las colectividades. Tampoco la música ciudadana ni la súplica a la Virgen por una buena cosecha. El pasaje del malambo fue sin dudas, uno de los más atractivos.
El espectáculo contó con 300 artistas en escena y culminó pasadas las 11.30 de la noche, entre papelitos dorados y la magia de los fuegos artificiales.
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