Hace unos días se frustró un nuevo secuestro virtual que tuvo su inició en Godoy Cruz. Los suspuestos captores llamaron desde un celular a la víctima pero se olvidaron de marcar como privado. Por ese motivo, el número de los sospechosos quedó registrado en el teléfono de la víctima y, de esa manera, supieron que estaban en el penal de San Felipe. Acusaron a tres reos -ya están privados de la libertad- y les secuestraron 22 celulares, chips, tarjetas con crédito y una hoja que tenía de título "La lista de la muerte" donde figuraban números telefónicos de futuras víctimas.
Ese papel quedó a disposición del fiscal de Mauro Perassi como elemento de prueba en la causa que tiene a 14 personas imputas por tentativa de estafa por los falsos secuestros. Si bien no trascendieron mayores detalles de esa hoja, se supo que habían una gran cantidad de números telefónicos, más de 20, que eran los apuntados para futuros engaños.
Pero, además, hallaron y secuestraron 22 celulares que ahora serán analizados para determinar qué llamados realizaron y qué vinculación tienen con la primera banda de secuestradores virtuales que cayó el sábado 3 de setiembre en una gomería de Godoy Cruz.
En cuanto a este punto, también quieren saber cómo hicieron para tener esa gran cantidad de artefactos en su poder. Si bien el uso de teléfonos por parte de internos está prohibido en todas las cárceles, desde el Servicio Penitenciario han explicado anteriormente que "no se le puede prohibir la comunicación con la familia". Sin embargo, también detallaron que "siempre se hacen requisas durante el año para secuestrarlos".
Los tres detenidos, condenados por diferentes delitos, fueron notificados por la tentativa de estafa que cometieron el domingo pasado luego de querer engañar a una mujer de Godoy Cruz.
Los secuestros virtuales es una modalidad que ha crecido en Mendoza en los últimos años. Con este tipo de investigación se avanza en la línea de descubrir cuántas bandas hay dedicada a esto en la Provincia.
