La presidenta Cristina Fernández de Kirchner sostuvo hoy que este Gobierno "no permite que nadie le marque la cancha" al señalar que en el mundo existen "algunos que quieren que unos estén subordinados y los otros mandarnos".
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner sostuvo hoy que este Gobierno "no permite que nadie le marque la cancha" al señalar que en el mundo existen "algunos que quieren que unos estén subordinados y los otros mandarnos".
La mandataria advirtió por cadena nacional que la Argentina es un país "de ovarios, por lo menos hasta el 10 de diciembre", cuando tenga que entregarle la banda a su sucesor.
"Estamos abiertos a todo el mundo, pero sin imposiciones de nadie, porque somos un país, como digo yo, de ovarios, por lo menos hasta el 10 de diciembre, después va a haber que elegir", aseguró la mandataria, quien resaltó que "no solamente el documento de identidad te marca si sos hombre o mujer".
Al encabezar un acto en Zárate, donde habilitó la generación plena de la central nuclear Néstor Kirchner (Atucha II), Cristina llamó a los argentinos a "abrir bien los ojos, piensen como piensen y voten como voten".
"No somos aislados, vivimos en un mundo de intereses que quieren que unos estén subordinados y los otros mandarnos y se enfrentan con gobiernos como éste, que no permite que nadie le marque la cancha", advirtió la Jefa de Estado.
No habló en forma directa sobre su imputación por encubrimiento del caso AMIA, ni de Nisman ni de la marcha de hoy. Sí pidió que "nos nos trasladen conflictos que no nos son propios", y agregó "somos un país pacífico, somos todos hijos de inmigrantes, nos peleamos más por fútbol y política pero jamás por las religiones que profesamos".
Afirmó que lo que les preocupa a las grandes potencias es el regreso de la Argentina al selecto club de once países en el mundo que tienen capacidad de enriquecer uranio, al hablar hoy en la puesta en marcha al cien por ciento de la central nuclear Atucha II-Néstor Kirchner, en la localidad bonaerense de Lima en el partido de Zárate.
Por eso nuestro canciller (Héctor Timerman) envió dos cartas a dos actores importantes de la política internacional explicando que Argentina es un país pacífico, señaló.
Acompañaron a la primera mandataria en el acto, el jefe de Gabinete Jorge Capitanich, el secretario general de la Presidencia Aníbal Fernández, el gobernador bonaerense Daniel Scioli y los ministros Julio De Vido (Planificación Federal) y Axel Kicillof (Economía), entre otros funcionarios.
Con su puesta en marcha total, la central nuclear Atucha II-Néstor Kirchner sumará a partir de hoy 745 megavatios al sistema eléctrico nacional. El complejo atómico se encuentra ubicado en la localidad bonaerense de Lima en el partido de Zárate, a unos 80 kilómetros de la ciudad de Buenos Aires.
No son voces ingenuas
Cristina también habló de la disputa con industriales por el acuerdo con China. La presidenta Cristina Fernández afirmó hoy que "no son voces ingenuas" aquellos sectores que cuestionan la política industrial del Gobierno y pidió que "no nos vengan a contar a nosotros que no vamos a defender el trabajo y las empresas de los argentinos".
En un discurso transmitido a través de la cadena nacional, la mandataria resaltó: "No soy ingenua" y advirtió a los argentinos que "estamos cruzados por profundos intereses políticos".
Durante un acto en el partido bonaerense de Zárate, en el complejo nuclear Atucha, la Presidenta aseguró que el Gobierno "no permite que nadie le marque la cancha".
En cuanto al futuro, Cristina Fernández de Kirchner afirmó que en este año "hay que garantizar que quien conduzca este Estado tenga las mismas ideas sobre soberanía, autonomía, ingreso popular, trabajo, ciencia y tecnología" y agregó que "ésta es la mejor herencia que debemos dejar".
"El Estado nacional son ustedes, los 40 millones de compatriotas. El Estado no me lo llevo a mi casa, el Estado se queda", dijo la mandataria. Fuente: Télam y DYN