El aumento de pasajeros transportados se debió, fundamentalmente, a que el tráfico en vuelos domésticos creció un 20 por ciento, con respecto a 2014, se operaron un 14 por ciento más de frecuencias, se promedió una ocupación del 77 por ciento y hubo un fuerte crecimiento en la oferta de asientos.
Las cifras alcanzadas en enero de este año permiten suponer que se llegará a la meta propuesta para el 2015: transportar 11 millones de pasajeros en el año.
En las rutas a Bariloche, Ushuaia, Iguazú y Calafate, centros turísticos por excelencia, Aerolíneas mantuvo un coeficiente de ocupación superior al 80 por ciento, en un contexto de crecimiento de la operación del 9 por ciento en Bariloche; un 11 por ciento en Ushuaia; un 18 por ciento en Calafate y un 7 por ciento en Mendoza.
El tráfico a los distintos destinos del noroeste argentino creció un 30 por ciento con respecto al primer mes del año pasado; mientras que el incremento de frecuencias a Mar del Plata, se pasó de dos a cuatro diarias, permitió transportar un 35 por ciento más de pasajeros que en 2014 con un coeficiente de ocupación superior al 80 por ciento.
En cuanto a las operaciones regionales e internacionales, Río de Janeiro encabeza la estadística de enero de este año con un incremento de pasajeros del 8 por ciento con respecto a 2014 y una ocupación del 81 por ciento. Lo sigue Miami, con el 87 por ciento de ocupación.
También se destacan los aumentos en el tráfico de pasajeros en los vuelos a Santiago de Chile, 15 por ciento más que en 2014 y Guarulhos (San Pablo), con un crecimiento del 9 por ciento. En ambos casos la ocupación de los vuelos fue de más del 85 por ciento.
Finalmente se aumentó un 55 por ciento la operación a Santa Cruz de la Sierra (Bolivia), con una ocupación del 87 por ciento; mientras que los nuevos destinos al Caribe (La Habana, Cancún y Punta Cana) operaron con más del 80 por ciento de ocupación.