Esta mañana se realizó en la Primera Cámara del Crimen una nueva audiencia en el juicio contra Ricardo Muñoz, el hombre acusado de matar a golpes a su esposa Mirta Naranjo. En la sala de debate declararon dos médicos que atendieron a la mujer en el hospital Central y con sus testimonios complicaron la situación del único acusado.
Sucede que los profesionales de la salud confirmaron que las lesiones que presentaba Naranjo eran compatibles con las heridas causadas por violencia familiar y aseguraron que el hematoma subdural le provocó un estado de mortalidad grave.
El primero en sentarse frente al tribunal presidido por Víctor Comeglio, fue el médico neurocirujano Jorge Atencio, quien intervino quirúrgicamente a Naranjo.
Atencio detalló que la mujer tenía una hemorragia craneal, por lo que debió ser operada.
Tenía problemas médicos previos, tales como vasculares, renales y de coagulación, lo que causaba mayor probabilidad de hematomas externos, dijo y agregó que el hematoma que presentaba en su cabeza no tenía heridas cortantes, por lo que pudo ser causado por un golpe de puño.
Estaba muy anticoagulada, por lo que un golpe leve pudo provocar este hematoma subdural, explicó el médico ante la pregunta de la querella en manos de Fernando Peñaloza y Lucar Lecour e indicó que debido a que presentaba otros hematomas supuso que era producto de golpes.
Tenía muchísimo riesgo de vida y en pacientes anticoagulados la mortalidad es muy alta, más allá de la evacuación del hematoma. Si bien es una enfermedad grave en cualquier paciente, es su caso era aún más, dijo Atencio.
Por su parte, el médico terapista Roberto Urbaneja indicó que al consultarle a la hija si las lesiones que tenía su madre respondían a violencia familiar, la joven afirmó con la cabeza y dijo que fueron provocadas por el cónyuge de la mujer.
Frente a la pregunta del fiscal Javier Pascua, el médico detalló que debido al complicado estado de salud de Naranjo, el hematoma subdural pudo ser causado por un mero cimbronazo.
Asimismo agregó que si no hubiese presentado este traumatismo, su estado se podría haber revertido sin necesidad de terapia intensiva ni intubación.
Ese traumatismo empeoró su pronóstico, y debido a que presentaba múltiples lesiones en su cuerpo no creo que haya sido espontáneo, dijo y señaló que las lesiones eran compatibles con las de violencia familiar.
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