Este truco de jardinería ayuda a estimular el desarrollo de las plantas durante el invierno y es ideal para fortalecer a la sansevieria desde el sustrato.
Jardinería: el abono casero, económico y sencillo que tu sansevieria necesita en invierno
En jardinería, pocas plantas despiertan tanto interés como la sansevieria, también conocida como “lengua de suegra”. Este ejemplar, resistente y elegante, es uno de los más elegidos para decorar interiores gracias a su adaptabilidad y bajo mantenimiento. Sin embargo, durante el invierno, muchas veces su crecimiento se estanca si no se le brinda el cuidado adecuado.
Esta planta originaria de África es muy valorada en jardinería porque resiste condiciones adversas como ambientes secos, poca luz y riegos escasos. Además, es purificadora del aire y tiene un atractivo estético por la forma y el diseño de sus hojas verticales. Su facilidad para sobrevivir la convierte en la favorita de quienes están dando sus primeros pasos en el mundo de las plantas.
A pesar de ser resistente, la sansevieria también necesita una ayuda extra en invierno para mantenerse fuerte y seguir creciendo. En esta época del año, el metabolismo de las plantas disminuye y absorben menos nutrientes del suelo.
Para contrarrestar este efecto, es fundamental recurrir a un abono casero y natural que potencie su desarrollo sin recurrir a productos químicos. Una solución efectiva, económica y fácil de preparar es el fertilizante a base de arroz.
El arroz no sólo es un alimento esencial para los humanos, sino que también es un poderoso energizante natural para las plantas. Gracias a su contenido de almidón, este grano se convierte en una fuente de energía inmediata. Además, contiene minerales fundamentales como potasio, magnesio, fósforo, zinc e hierro, todos necesarios para fortalecer la estructura de la sansevieria.
Este abono casero no sólo mejora la nutrición del sustrato, sino que también estimula la firmeza y el crecimiento sostenido de las hojas, algo muy valorado por quienes disfrutan de tener plantas sanas y vigorosas todo el año.
El procedimiento es simple y está al alcance de cualquier aficionado a la jardinería. Poné a hervir un litro de agua, y cuando rompa el hervor, agregá una taza de arroz. No le sumes sal ni condimentos, ya que podrían dañar las raíces.
Una vez que el arroz esté cocido, colá la preparación. El grano podés consumirlo normalmente, pero el agua que quedó es el verdadero abono líquido que utilizarás. Esperá a que se enfríe y verté un chorrito sobre el sustrato de tu sansevieria. No riegues en exceso. Esta planta no tolera el encharcamiento y un exceso de humedad en invierno podría marchitar sus raíces.
La sansevieria crecerá con fuerza si combinás este fertilizante casero con cuidados básicos y constancia. Con este truco, vas a mantener tus plantas radiantes incluso en la temporada más fría./Alternativa ecológica.