Dejan como saldo la muerte de ovejas y otro tipo de ganado menor. No se trataría de perros cimarrones.
Los vecinos no ocutaron su angustia.
Vecinos autoconvocados de la zona periurbana de Malargüe han manifestado su preocupación ante ola de ataques de perros a sus fincas, que se intensificaron durante la noche, la madrugada y las primeras horas de la mañana. Los incidentes, que ya han sido denunciados ante la Policía de Mendoza.
Este miércoles, un grupo de residentes del sector suroeste de la ciudad de Malargüe alzó la voz para exponer un problema que padecen desde hace tiempo: el constante ataque de jaurías al ganado que crían en sus fincas, ubicadas en las colonias Pehuenche 1 y 2.
Alexis Cianci, uno de los voceros de los damnificados, relató el enorme problema que atraviesan. "Hemos podido identificar a varios canes que son los que provocan estos desmanes", explicó refiriéndose a "ovejeros, un labrador y un dogo cruza argentino". Estos animales, según su testimonio, ingresan a las propiedades a pesar de las medidas de seguridad implementadas por los vecinos para resguardar a su ganado, que incluye ovejas, conejos y gallinas, siendo estos últimos los más afectados.
"Hemos contado diez familias afectadas en el término de cuarenta y cinco días", señaló Cianci, marcando un patrón preocupante. "Son perros que están habitualmente acostumbrados a comer carne cruda", advirtió, lanzando un contundente pedido público para que los dueños de estos animales se hagan cargo de los daños generados. La preocupación es mayúscula, ya que Cianci remarcó el riesgo latente de que estos perros puedan atacar a personas.
Natalia Méndez, otra de las afectadas, compartió su dolorosa experiencia. "Anoche", relató, los mismos perros que atacan a sus vecinos ingresaron a su finca, dejando como saldo la muerte de ovejas "que estaban por parir". En ocasiones anteriores, estos animales ya habían matado corderos de su propiedad y de la de su padre, quien también se dedica a la cría de ganado en un terreno contiguo.
Mariela Cayumil se sumó al coro de damnificados, contando que otros pobladores de la zona han sufrido la matanza de decenas de gallinas y conejos, además de la pérdida de sus propias mascotas.
Los ataques no solo ocurren en la oscuridad. Elizabeth Perea, con profunda angustia, contó que este mismo miércoles los canes mataron diez corderos y ovejas, un golpe devastador para un proyecto productivo familiar.
Para evitar la sobrepoblación de perros en la vía pública, y con ellos los problemas que generan cuando deambulan por las calles y los alrededores de la ciudad, es que el Área de Zoonosis de la Municipalidad de Malargüe, realiza periódicas campañas de castración y vacunación de perros y gatos.
Esta es una herramienta que muchos vecinos la utilizan para prevenir este problema, aunque otros no hacen un cuidado responsable de sus mascotas, por lo que se insta a sumarse a estas iniciativas que redundan en la salud pública.
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