El piloto argentino Franco Colapinto, de 21 años, sigue desafiando los límites físicos en su carrera por consolidarse en la Fórmula 1. Un video publicado recientemente por su equipo, Williams, muestra el exigente entrenamiento al que somete su cuello para resistir las fuerzas G que experimenta durante las carreras. Con autos que superan los 1.000 caballos de fuerza y velocidades de más de 300 km/h.
Colapinto, como todos los pilotos de la máxima categoría, se ve obligado a someterse a prácticas extremas para soportar hasta 5G de fuerza en las curvas más rápidas. Las imágenes muestran al joven bonaerense realizando una serie de ejercicios específicos para fortalecer su cuello, bajo la atenta mirada de su entrenador. "Vamos Franco, bien, bien hecho", se escucha decir a su preparador, mientras Colapinto realiza el esfuerzo con el rostro visiblemente tensionado. Este tipo de entrenamientos, fundamentales para evitar lesiones, recrean las condiciones extremas que experimenta un piloto durante la competencia.
Un entrenamiento “desagradable” y la carrera que se viene
Sobre el entrenamiento de su cuello, Franco comentó con humor en una entrevista, "es lo menos sexy que hay. Te ponen un coso en la cabeza que parecés un perro con bozal, te tiran del cuello y después quedás duro, tipo Robocop". A pesar de las risas, el piloto de automovilismo admite lo duro que es prepararse para soportar el estrés físico de la Fórmula 1, donde las exigencias son constantes.
Franco se sigue preparando para su cuarta carrera en la Fórmula 1, que será en el Circuito de las Américas, en Austin, Estados Unidos, el 19 y 20 de octubre. En esta cita habrá una carrera Sprint el sábado, que es más corta pero no menos intensa, y la competencia principal se disputará el domingo. Colapinto buscará mejorar su rendimiento luego de su 11º puesto en Singapur, tras haberse enfrentado a condiciones climáticas extremas en ese trazado.
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Los extremos ejercicios a los que se somete Franco Colapinto para fortalecer su cuello
Aunque el futuro de Colapinto en Williams para 2025 no está asegurado, el argentino espera nuevas oportunidades en equipos como Sauber o Racing Bulls. Con su arduo entrenamiento y destacada participación, está decidido a seguir escalando en la Fórmula 1. Como él mismo bromea, "Después te queda el cuello tan grande que parecés un rugbier más que un piloto de F1"./Olé.