El Club Atlético Gimnasia y Esgrima de Mendoza igualó 1 a 1 este sábado ante Estudiantes de Río IV, en un duelo clave en la Primera Nacional de fútbol. El Mensana al menos sumó un punto, que sirve para seguir prendido en el campeonato.
El Club Atlético Gimnasia y Esgrima choca chocó contra el Celeste por una nueva fecha de la Primera Nacional de fútbol. Mirá los detalles del duelo.
El Club Atlético Gimnasia y Esgrima tiene una dura prueba.
El Club Atlético Gimnasia y Esgrima de Mendoza igualó 1 a 1 este sábado ante Estudiantes de Río IV, en un duelo clave en la Primera Nacional de fútbol. El Mensana al menos sumó un punto, que sirve para seguir prendido en el campeonato.
Con la ilusión intacta y la mochila cargada de confianza, Gimnasia y Esgrima de Mendoza fue hasta Río Cuarto con la idea fija de seguir trepando en la tabla. Pero enfrente tuvo a un Estudiantes duro, en su casa, que lo apretó hasta el último minuto. El empate 1 a 1 terminó dejando sabor a poco para los dos: el Lobo quería volver al podio y el León cordobés, prenderse de lleno en el Reducido.
El partido arrancó con emoción tempranera. A los pocos minutos, Brian Ferreyra aprovechó un descuido en el fondo local y metió el 1 a 0 para el Mensana, que golpeó de entrada y encendió la ilusión mendocina. Pero la alegría duró poco: Martín Garnerone, con olfato de goleador, se encargó de empardar las cosas y devolverle la paridad al marcador.
A partir de ahí, el trámite se volvió friccionado, con cierto dominio del local, que manejó más y mejor la pelota. Gimnasia aguantó, pero también se animó a salir cuando pudo. Sin embargo, la falta de puntería en los últimos metros volvió a pasar factura. Los ingresos desde el banco no lograron cambiar la historia, y el Lobo se fue apagando de a poco en ataque.
En el complemento, Estudiantes empujó con su gente y generó varias situaciones claras. El equipo de Ezequiel Medrán mostró carácter para resistir, aunque sufrió más de la cuenta y terminó celebrando el punto como consuelo. Porque sí, sumar de visitante nunca está mal, pero el objetivo era otro.
Después de su visita a Río Cuarto, el Lobo volverá a rugir en el estadio Víctor Legrotaglie. El próximo compromiso será el domingo 22 de junio, cuando reciba a Talleres de Remedios de Escalada ante su gente, con la ilusión de seguir soñando con el ascenso.