Lamentablemente una vez más quienes disfrutan los paisajes de San Rafael vuelven a ser protagonistas de las crónicas policiales. El pasado lunes (27) una mujer de Buenos Aires murió tras caer por un barranco en el Cañón del Atuel. Mientras que el jueves la tragedia golpeó a una una familia que se bañaba en Los Reyunos cuando fue sorprendida por la creciente de los cauces.
Los integrantes de la familia fueron arrastrados por el agua en el sector llamado Bajo Rosado en Los Reyunos. Del grupo familiar, los padres de los niños y una niña de 4 años pudieron salir por sus medios, no así el menor de 7 años. Horas más tarde, la policía y rescatistas encontraron sin vida al niño que permanecía desaparecido.
Tras el hecho, surgieron dudas respecto a la erogación de agua en los cauces y el pulso de la misma que produce aumento del caudal y aumento de altura en el lugar y por ello, el ingeniero Luis Guidobono, de hidroeléctricas Nihuiles, habló al respecto.