Julio Benítez recibió el alta médica y declarará este lunes frente al juez Ariel Lijo, que intenta determinar la responsabilidad del motorman en el accidete del sábado.
Julio César Benítez, el maquinista de la formación "Chapa 5" del ferrocarril Sarmiento que chocó contra el andén de la estación Once, será indagado en la tarde de este lunes por el juez Ariel Lijo, que investiga el siniestro que dejó 80 heridos el sábado último.
Fuentes judiciales confirmaron a minutouno.com que el conductor recibió este mediodía el alta médica en el hospital Dupuytren, donde permanecía internado.
Benítez está imputado y será indagado por el delito de "estrago", con la defensa de la abogada Valeria Corbacho, que patrocina al gremio La Fraternidad y defiende también a Marcos Córdoba, el motorman que será juzgado por la tragedia de Once de febrero del año pasado, según publica Minutouno.
Para los investigadores, el motorman, que permanece detenido, está complicado porque, además, sospechan que intentó destruir prueba que lo incriminaría.
Para el juzgado, hasta el momento la hipótesis es que el maquinista intentó robar el disco rígido de la cabina. Los investigadores no pudieron ver las imágenes porque está dañado, y hoy intentarán restaurarlo con la colaboración de empresas privadas que se dedican a esa actividad.
El juez ya ordenó analizar los rastros de sangre hallados en la mochila del maquinista y en el disco que fue sustraído, por lo que los peritos determinarán si las muestras tomadas coinciden con las del motorman.
Fuentes judiciales confirmaron a minutouno.com que la hipótesis de que el disco fue "plantado" en la mochila está prácticamente descartada por los funcionarios del juzgado. Consideran que habría sido muy difícil hacerlo ya que en el lugar de los hechos había numerosos testigos, como los paramédicos del SAME, policías y pasajeros.
Hasta el momento varios indicios complican al maquinista del Chapa 05. En la causa iniciada hay evidencias de que el tren que circulaba a una velocidad excesiva y de que, además, el conductor habría extraído, tras el choque, el disco rígido con las imágenes tomadas en la cabina, por lo que habría tenido intencionalidad de ocultar pruebas, sospechan los investigadores.
Lo que estaría claro es que el tren ingresó a 22 kilómetros por hora en el andén, cuando en promedio lo hacen a 12 kilómetros por hora.
En tanto, el juez Lijo ya revisó las imágenes captadas por las cámaras del último vagón del tren, en las que se vería que Benítez aceleró más de lo debido en algunos tramos del viaje.