Una obra aprobada hace siete años que pudo evitar los choques en el Sarmiento
El sistema de frenos automáticos se licitó dos veces, pero jamás se realizó; recién en septiembre se volvió a encargar el trabajo y estaría terminado en febrero de 2014.
Desde hace casi siete años, la línea de ferrocarril Sarmiento tiene pendiente la obra de señalamiento con detención automática que podría haber evitado el choque de ayer en la estación terminal de Once y el de junio pasado en Castelar. Ambos siniestros contabilizaron 420 heridos.
En diciembre de 2006, el entonces secretario de Transporte Ricardo Jaime había aprobado los trabajos de señalización del Sarmiento que incluía la instalación de un sistema de detención automática de formaciones, lo cual permite frenar unidades sin tener que depender exclusivamente del conductor de la unidad.
A pesar de que el Estado Nacional había pagado un adelanto de $60 millones para la obra a la firma Siemens, los trabajos no se realizaron a causa de que los precios se desactualizaron por la inflación. De acuerdo al expediente S02:0007888/2012, entre 2006 y 2012 sólo se había realizado el 3,9% de los trabajos requeridos por esta obra.
La historia de la malograda señalización empezó a principios de 2007. Mediante el documento 0144-B00000278, del 15 de enero de ese año, por $51,819 millones, la compañía alemana facturó al Estado el adelanto de gastos. TBA, que cobraba un importe por gerenciar la obra, presentó la factura 0001-00003882 por $6,39 millones de pesos. El 15 de junio, Siemens retiró un primer pago de $7,38 millones de pesos. El resto quedó pendiente.
Según había publicado La Nación en junio pasado, hubo al menos diez pedidos de actualización de precios por parte de los contratitas a las autoridades de Transporte, pero no hubo respuesta. El valor original de la obra era de $291 millones.
Más tarde, el julio de 2012 el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, anuló dicha licitación. Luego llamó a una nueva a la que se presentaron como oferentes Roggio-Thales, Emepa-Alstom y Ansaldo-Comsa-Vosslow. Se repitió la historia, volvió a quedar en suspenso y terminó cancelada.
Recién el 24 de septiembre pasado, Randazzo anunció que la obra de señalamiento con detención automática se realizará con China Railway Signnal Communication (CRSC) por adjudicación directa y estaría concluída para febrero de 2014.
Este sistema de frenos (llamado "ATP") está conectado al señalamiento de las vías y si se produce una alerta en algún punto del recorrido de la formación, esta se frena automáticamente a pesar de que el conductor no le de la orden. Así se puede reducir significativamente el "riesgo humano" asociado a la conducción de cualquier tren.
"De ahí surge la demanda de la sociedad para que ese sistema de seguridad no descanse sólo en manos humanas. Si hubiéramos tenido sistemas de detención automática no habrían pasado esos accidentes", había dicho Randazzo cuando se anunció la compra de este sistema al contratista chino.