Fue una tarde noche perfecta para Quilmes, que logró convertir después de cinco encuentros y sumó de a tres luego de no poder hacerlo durante seis presentaciones, situación que lo llevó a pender de un hilo a Nelson Vivas, quien pudo tomar algo de oxígeno con esta victoria, y además ensanchó su promedio, algo que ya empezaba a preocupar seriamente a todos.
Aprovechó una pelota parada bien ejecutada por Miguel Caneo (una de las figuras) en el primer tiempo y fue el juvenil Alan Alegre (hijo del técnico de Tigre), el que decretó la ventaja en el marcador para la visita, que luego se replegó como pudo e intentó pegar de nuevo de contragolpe. Tuvo a Peratta inspirado y por eso tal vez el tanteador no volvió a moverse.
La pena se apoderó de los locales, que no pudieron festejar en el Mario Alberto Kempes y escalar posiciones en el campeonato. Zielinski y todos los "Piratas" lamentarán haber perdido una buena ocasión para estirar la racha sin derrotas, que llegó a su fin, cuando llevaba seis.
El "Cervecero" jugará una final por el descenso la próxima fecha, con Atlético Rafaela y en condición de local. Por su parte, Belgrano visitará nada menos que a River en Núñez, en una cancha en la que está 'dulce' desde hace tiempo.
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