La mejora en la calidad de vida es una de las preocupaciones que desde la medicina constantemente se busca mejorar. Los problemas óseos ocupan un lugar especial dentro de este ámbito, y la práctica de transplantes hoy resultan una solución efectiva.
La mejora en la calidad de vida es una de las preocupaciones que desde la medicina constantemente se busca mejorar. Los problemas óseos ocupan un lugar especial dentro de este ámbito, y la práctica de transplantes hoy resultan una solución efectiva.
En Mendoza el Dr. Claudio Cvejanov, jefe del área de Traumatología del Hospital Español y miembro de la Asociación Argentina de Ortopedia Oncológica, se encuentra a la cabeza del Centro de Transplante Óseo Articular de dicha institución, y es uno de los médicos especializados en esta innovadora práctica.
En diálogo con SITIO ANDINO, el profesional explicó que un transplante o injerto óseo es el reemplazo de un fragmento de hueso por otro perteneciente a una persona que lo donó previamente. Cuando ocurre un procedimiento en el que se donan los tejidos por ejemplo, en el caso de muerte cerebral se extraen los huesos que luego serán transplantados.
El especialista aclaró que para este procedimiento también se puede utilizar material óseo proveniente de la misma persona que va ser intervenida, pero el problema es que muchas veces la cantidad no alcanza.
Aplicaciones
Hoy este tipo de procedimiento se utiliza principalmente en cirugías oncológicas y en recambio de prótesis óseas. En el primer caso, los beneficios obtenidos son notorios porque se evitan situaciones de amputación. Estamos hablando de asegurar una buena calidad de vida para un niño o un joven que, en otra época, hubiese perdido el miembro afectado por el tumor, aseguró Cvejanov.
Este tipo se cirugía, que se aplica en la provincia desde el 2007, utiliza un procedimiento que es distinto al efectuado durante el transplante de cualquier órgano.
A diferencia de lo que es corazón o pulmón que permite sólo entre 4 o 6 horas para colocarlo, una vez que se obtiene el hueso se toman muestras y pasa a un freezer que se encuentra a menos de 80 grados. Allí debe permanecer 3 meses, y luego de dicho período se le hacen estudios para comprobar que no posea ninguna enfermedad. Luego de todo este proceso, lo que se está utilizando en la cirugía es una estructura. Por último, el hueso del organismo de la persona coloniza este injerto y de a poco lo transforma en su propio hueso.
A pesar de los avances, el doctor aclaró que, como todo procedimiento, siempre tiene sus complicaciones, lo que no significa que no sea un gran avance.
Un trabajo en quipo
Para desarrollar esta labor, el Centro de Transplante Óseo Articular del Español −que cuenta especialmente habilitado por el INCAIMEN (INCUCAI-Mendoza) − obtiene los huesos necesarios para los transplantes a través de bancos de huesos externos. Trabajamos con bancos regionales o de otro lugar que tienen un mayor caudal, y colaboramos mutuamente, como con el Hospital Británico, el Hospital Austral, Biotar en Rosario, aclaró el especialista.
Otros lugares en la provincia que cuentan con habilitación para realizar transplantes óseos son las clínicas Francesa y Santa María. Por su parte, el Hospital Español es el que lleva más tiempo funcionando, con 120 procedimientos realizados hasta el momento.
Resulta importante tener en cuenta que las técnicas que se utiliza en Mendoza son las mismas que se aplican en cualquier lugar del mundo. Argentina inició está práctica en 1956 en el Hospital Italiano de Buenos Aires, nosocomio pionero en patología ósea.
Hoy se busca dar calidad de vida sin importar la edad de la persona, y el avance que implican estos procedimientos es fundamental, concluyó el Dr. Cvejanov.