Es imprescindible para multitud de reacciones bioquímicas relacionadas con el funcionamiento de los nervios, la síntesis de proteínas, el control de la glucosa en sangre y la regulación de la presión arterial, entre otras cosas.
El magnesio es el cuarto mineral más abundante de nuestro organismo, imprescindible para multitud de reacciones bioquímicas relacionadas con el funcionamiento de los nervios, la síntesis de proteínas, el control de la glucosa en sangre y la regulación de la presión arterial, además de formar parte de los huesos y ser necesario para la síntesis del material genético (ADN y ARN). Y, por lo tanto, incluir en nuestra dieta alimentos que lo contengan resulta esencial para la salud.
Según la Universidad de Harvard (EE UU), el alimento que más magnesio contiene es el bulgur, un cereal muy usado en la cocina de Oriente Medio y África del Norte, con 230 miligramos de magnesio por taza de cereal seco. Le sigue la cebada (158 mg por taza) y, en tercera posición, las espinacas cocinadas (157 mg por taza). El ranking de los diez alimentos con más cantidad de magnesio lo completan las pipas de calabaza, la harina de maíz, los frijoles, la remolacha verde, un pescado conocido como halibut o fletán del pacífico, las almendras tostadas y el arroz integral.