La justicia brasileña propuso transformar el estadio de Manaos (norte), una de las sedes de la Copa del Mundo de 2014, en una cárcel provisoria después del torneo para hacer frente al hacinamiento penal.
La justicia brasileña propuso transformar el estadio de Manaos (norte), una de las sedes de la Copa del Mundo de 2014, en una cárcel provisoria después del torneo para hacer frente al hacinamiento penal.