Frente a la violencia que viven las docentes, alumnos y la comunidad educativa en general, la Dirección General de Escuelas envió a las aulas públicas y privadas de nuestra provincia un "Protocolo de procedimiento ante situaciones emergentes en las escuelas". Hubo alta asistencia de personal docente en las jornadas.
"Somos profesionales de la educación y estamos preparados para tratar con adolescentes pero la situación actual nos sobrepasa", indicó una profesora de área de humanidades de la Escuela Normal de Ciudad.
Hubo sorpresa por parte de una gran cantidad de docentes, al enterarse que el protocolo ya estaba ejecutado y no iban a crearlo desde las aulas teniendo en cuenta sus verdaderas y particulares problemáticas.
"Nos vemos vulnerados en nuestros derechos individuales y en nuestros derechos como docentes, no nos sentimos contenidos y muchos de los puntos del protocolo no tienen que ver con nuestro verdadero objetivo, que es enseñar", manifestó otra docente.
Los docentes expresaron que la situación que se vive en escuelas privadas es tan o más preocupante que la que se desarrolla en instituciones públicas e insistieron en una necesaria contención familiar para no lamentar más hechos de violencia escolar.
Por otro lado, desde las autoridades de colegio Agustín Álvarez, la regente Silvina Vaquer destacó el compromiso de los docentes, ya que "todas las partes debe trabajar para solucionar la problemática que vivimos a nivel social".
En las jornadas llevadas a cabo en esa institución se manifestó la necesidad de un sistema que actúe de manera preventiva ante la violencia que se registra en las escuelas para no tener que pensar cómo actuar una vez que las cosas ya sucedieron.
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