Un viaje intenso. Eso es lo que propuso el ex líder de La Portuaria al presentar en Mendoza Célula, el segundo disco de su nueva etapa como solista. Diego Frenkel parece haber dejado atrás el prototipo de hombre del rock capaz de engendrar hits radiales infalibles, para transitar un presente que vibra en una sintonía más introspectiva y sincera.
|
Una gran noche para Diego Frenkel en Mendoza. Brindó un concierto acústico junto a una de las integrantes de su banda, Lucy Patané. |
Con este renovado equipaje artístico y en compañía de la guitarrista Lucy Patané, es que el músico se entregó al fluir de un concierto acústico donde las canciones del nuevo material se soltaron una tras otra. El poniente, Emergencias, Espíritu salvaje, Conciencia, Sonata 21, La sombra y el tema que la de nombre al álbum, se escucharon como las partes de un todo dramático, complejo y lírico al mismo tiempo.
|
El motivo del encuentro fue presentar "Célula", el segundo trabajo de su nueva etapa como solista. |
Si bien el material se desnudó de forma más íntima y despojada instrumentalmente, Frenkel se encargó de no necesitar nada más que el maleable uso del registro de su voz, el sonido de las dos guitarras rasgueando acordes transgresores y una puesta de luces y humo de estética cinematográfica para cautivar al público presente.
Lo nuevo fue recibido con la misma atención con la que se participa de un ritual sagrado del que no somos parte, pero al que hemos sido invitados. Aunque también la noche creció en expectativa por los clásicos del pasado, por lo que para cerrar la noche, el frontman entregó interesantes versiones de Diez mil Kilómetros, A través de tus ojos, Río herido y Mira las nubes.
