Belgrano venció a Argentinos y alimentó la ilusión del Independiente
Melano, Márquez y Zapata le dieron la victoria por 3-1 al "Pirata". Matellán había marcado el empate parcial para "El Bicho", que queda complicado, solo tres puntos por encima del Rojo.
La semana de Argentinos Juniors había sido atípica, convulsionada y 'caliente'. La derrota con San Martín hizo que Ricardo Caruso Lombardi critique a sus jugadores y que el presidente, Luis Segura, salga a declarar que "yo no vendí el descenso". Para colmo de males, Independiente ganó Independiente y quedó solamente a tres puntos del equipo de La Paternal en el promedio. Así, el local recibía a Belgrano con la obligación de cortar la racha de cuatro derrotas consecutivas.
Y el encuentro en el Diego Armando Maradona comenzaba bastante friccionado,sin que ninguno de los dos equipos lograra tener dominio del balón ni profundidad. Belgrano era apenas un poco más claro, pero no demasiado. Sin embargo, con el correr de los minutos el local comenzaba a intentar y avisar con los primeros destellos de Rodrigo Gómez. Pero el Pirata no lo dejó acomodarse y lo golpeó en el momento justo.
Tan sólo diez minutos se habían jugado cuando se encontró con la sencillez que lo caracteriza y abrió el marcador: desborde de Juan Quiroga con centro al área que no logra ser conectado por Martín Zapata y se la terminan cediendo a Lucas Melano que había quedado solo frente al arco y no perdonó.
Lejos de permitir quedar sentido, el local salió en busca de poder igualar el partido, aunque carecía de claridad y no podía hilvanar ni siquiera tres pases seguidos. Esto despertó rápidamente la impaciencia de sus hinchas que comenzó a insultar a los jugadores. Fue entonces que el pibe Gómez comenzaba a ponerse el equipo al hombro y a los 17 minutos ejecutó un tiro de esquina que fue conectado de cabeza por Pablo Hernández y despejado de gran manera con un manotazo en la línea por Juan Carlos Olave, aunque con la mala fortuna de que el rebote le quedó a Aníbal Matellán que no perdonó y decretó el 1-1 parcial.
El partido ya avisaba que no era apto para cardíacos por la cambiante del duelo en tan sólo minutos. Y cuando el Bicho intentaba ir por más, nuevamente golpeó con la misma formula el Celeste. Se jugaban 32 minutos cuando en esta ocasión es Melano quien desborda, esta vez lo hace por derecha, y manda un centro al área que es dejado pasar por Zapata para que aparezca por detrás Fernando Márquez y vuelve a poner en ventaja a la visita. De allí en adelante, prácticamente todo fue del Bicho, o más bien de su jugador más desequilibrante Rodrigo Gómez, que volvió loco al fondo pirata, aunque no pudo revertir el marcador y la primera etapa culminó con el vibrante 1-2 parcial.
Las urgencias invadían al Bicho y por eso en el complemento salieron con todo en busca del gol que les permitiera no quedarse con las manos vacías. A poco del inicio, Caruso decidió meter mano en el equipo y mandó al campo al habilidoso Daniel Villalva. Sin embargo, con este ingreso, el local dejó de hacer participar tanto a su mejor jugador Gómez- y si bien fue muy voluntarioso, careció de ese desequilibrio peligroso con el que contó en los primeros 45 minutos y que había comenzado a convertir a Olave en figura. Y una vez más el mismo desenlace: cuando Argentinos más iba, golpeó el elenco de Córdoba. Fue a los 15 minutos que Zapata recibió el balón, encaró hacia el arco y mandó el balón al fondo del arco ante la desesperada salida de Nereo Fernández.
El local pareció sentir el cachetazo, pero enseguida se recuperó y continuó con la voluntad que le hacía ir a buscar el partido, aunque siempre careciendo de ideas y claridad como para poder lastimar. Por su parte, Belgrano mantenía el orden necesario como para no sufrir sobresaltos, además de contar con un atentísimo Olave, que se fue convirtiendo en figura dado que gracias a él su equipo contó con la tranquilidad necesaria como para saber cuándo golpear y sentirse seguro atrás.
No hubo tiempo para más en cuanto a lo futbolístico, aunque sí para que los hinchas del Bicho explotaran y obligaran a detener el encuentro durante varios minutos sobre el final, debido a una inmensa cantidad de pirotecnia que encendieron en la tribuna y que luego comenzaron a arrojar al campo muy cerca del arquero Nereo Fernández. Luego hasta comenzaron a patear el alambrado y amenazaban a los jugadores con el cántico jugadores, jugadores, no se lo decimos más, si nos mandan al descenso, que quilombo se va a armar.
Pese a esto, Vigliano reanudó el encuentro a los 47 minutos y dos minutos después lo terminó, concretándose asé la victoria por 3 a 1 de Belgrano que le permitió afianzarse en la zona de ingreso a la Sudamericana. Por su parte, Argentinos quedó sumamente comprometido al sumar su quinta caída consecutiva y quedar a tansólo tres puntos del Rojo (que festejó como nunca) en los promedios.